A propósito del artículo Zurda cuántica de César Prado en Hildebrandt en sus 13
Hace unos días, cuando firmé un comunicado en respaldo a Verónika Mendoza recibí muchos comentarios que cuestionaban que la agresividad e intolerancia que las firmantes creíamos se había desatado contra Verónika, podía describirse como acoso político, menos que este tenga su origen en una cuestión de género.
Al leer el artículo de referencia, me ratifico en mi firma y quiero explicar por qué.
El artículo comienza con una bajada sensacionalista y se refiere a la alianza como una "promiscua decisión". En las líneas que siguen, vuelve sobre las metáforas de connotación sexual afectiva y describe a la alianza como un "servinacuy electoral". Si tomamos en cuenta que la nota toma posición en contra de la conveniencia de la alianza y responsabiliza a Verónika Mendoza de esa mala decisión, creo que cabe preguntarse: ¿es casualidad que el periodista utilice dos referencias de connotación sexual que, desde una perspectiva conservadora, son nocivas para el ideal de mujer: promiscuidad y convivencia sin vínculo matrimonial? Yo creo que no. Creo, más bien, que el subtexto detrás de esas dos metáforas es críticar a Verónika no sólo en su condición de política, sino también de mujer, deslizando una idea muy arraigada en el sentido común machista: hay mujeres que son tan interesadas que no temen alejarse del ideal impoluto de mujer y se acuestan/alían con cualquiera.
Hago notar esto por la misma razón por la que decidí firmar el respaldo a Verónika Mendoza: encuentro mucha incoherencia en criticar una alianza por considerar que pone en cuestión el compromiso de una organización política con la agenda feminista, y a la vez ser condescendiente con el acoso político a una de las principales líderes políticas y feministas de este país.
En este mismo artículo, además, el señor Prado me llama "ave migratoria" y "villaranista". Asumo que el señor Prado desconoce -aunque pudo preguntar- que mi militancia en la izquierda tiene más de 14 años y que si bien compartí con Susana, primero una lista electoral y, luego, la acción de gobierno, nunca milité junto a ella, ni mi vida política se reduce a esa experiencia: he sido dirigente estudiantil, regidora de Lima, promotora de Habla Castañeda y, actualmente, dirigente de Fuerza Ciudadana. En fin, digo todo esto porque nunca me resignaré a la idea de que los políticos debemos aguantarlo todo.
La lucha por las causas feministas se deben dar en todos los frentes, en particular, en la política y en la prensa, dos espacios fundamentales para transformar sentidos comunes.
¡Buen resto de domingo y sigamos en la lucha, pues sin dudas necesitamos un nuevo Perú!
(https://www.facebook.com/maritebustamanteperu/)
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