domingo, 12 de marzo de 2017

OPINIONES 12/03/2017

Alianza del Pacífico: ¿Un Alca sin EEUU? - Alan Fairlie
Apestado, se busca - Mirko Lauer
Corrupción y Neoliberalismo en el Perú (II) - Félix Jiménez
Intolerancia de género - Claudia Cisneros
La desigualdad ideal - Richard Webb
La obsesión de Ciro Alegría - Eduardo González Viaña
Lo que Trump no puede predecir - Ian Bremmer
Pensar y razonar antes de obrar - Guillermo Giacosa
Sarna con gusto - Rosa María Palacios
Urge un debate nacional - Enrique Fernández-Maldonado Mujica
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Alianza del Pacífico: ¿Un Alca sin EEUU?

Alan Fairlie



Hace poco el profesor Andrés Velasco, de la Universidad de Columbia , planteó una zona de libre comercio hemisférica sin EEUU, como respuesta a las medidas comerciales y proteccionistas que está tomando el nuevo gobierno de ese país. Asimismo, que la Alianza del Pacífico puede ser el acuerdo a partir del cual se concrete esta iniciativa.

Enrique Peña Nieto y Juan Manuel Santos

ALCA sin EEUU

Coincidimos con el autor, en que se abren nuevas oportunidades de integración regional para América Latina. El retiro de EEUU del TPP, dejó sin piso estrategias que apostaron todo a este mega-proceso regional.Las políticas comerciales del nuevo gobierno, replantean TLCs y acuerdos comerciales ya firmados, redefiniendo la trama de acuerdos existentes y abriendo puertas de renegociación que antes estaban prácticamente cerradas.

No solo para los gobiernos, sino también para sectores empresariales que fueron afectados por los TLCs, o la falta de agendas complementarias internas. Recientemente, la Sociedad Nacional de Industrias, advertía de los riesgos de un TLC con India o con Indonesia. Es decir, no solo hay una salida de acuerdos mega-regionales, sino que la vía bilateral se puede poner en revisión. Esto constituye un nuevo escenario.

El proteccionismo de EEUU y las nuevas políticas migratorias, así como las financieras, llevan no solo a países como México a mirar nuevamente la región.Velasco plantea como respuesta, una zona de libre comercio hemisférica sin EEUU. EL ALCA sin EEUU, en otras palabras. Un ALCA más flexible, ya que se podrían evitar los temas más sensibles en propiedad intelectual, y otros capítulos de negociación impulsados por ese país. Esa es una opción, pero no la única.

Podemos ir más allá de una zona de libre comercio, comenzando por Sudamérica, en base a los compromisos asumidos en ALADI. Se puede profundizar los acuerdos alcanzados hasta el momento. No solo considerando a la Alianza del Pacífico, es necesario una convergencia con los otros acuerdos de integración existentes.

De hecho, ALADI y otros organismos multilaterales han hecho estudios de convergencia, en el pasado.Acaban de lanzar una iniciativa para un estudio conjunto con CEPAL, INTAL y otros organismos, para buscar alternativas que profundicen la integración regional. Esta es una visión que compartimos, diferente a la que plantean autores como Velasco.

ALIANZA DEL PACÍFICO
El 10 de marzo hubo una Cumbre Virtual de la Alianza del Pacífico. La reunión convocada por Chile, que tiene la presidencia del bloque, sirvió para analizar el estado de las economías de los cuatro países.

También, para reflexionar sobre los retos para la integración comercial y financiera en América Latina, en el contexto global actual. Y, un balance de los avances realizados por los equipos técnicos a cargo, de implementar la agenda establecida en la cumbre del bloque que se celebró en junio del año pasado en Puerto Varas.

Lo que se ha difundido a la prensa, es que se buscará un acercamiento con ASEAN, y nuestros países vecinos. Nos parece bien, ya que el comercio de Perú con los países del sudeste asiático, es marginal. Nuestros principales vínculos económicos son con China, Japón, Corea.

También, el fortalecimiento de vínculos con nuestros vecinos. Pero, tenemos una zona de libre comercio en la Comunidad Andina, sería una adecuada oportunidad para ver el estrechamiento de relaciones entre la CAN y la Alianza del Pacífico. Asimismo, con los otros acuerdos comerciales de la región. Por eso será tan importante concretar la iniciativa de ALADI, anteriormente señalada.

PROPUESTA
Se ha producido una caída en el comercio intrarregional, cuando debería jugar un rol contracíclico, como en coyunturas pasadas. Es un comercio de productos manufactureros o de mayor valor agregado, intraindustrial. Ha tenido un efecto plataforma, generando primero economías de escala, aprendizaje en el ámbito regional, para luego lograr competitividad en mercados extra-regionales. Constituye una especialización exportadora cualitativamente diferente, a la primario-exportadora que tenemos con el mundo en su conjunto.

Impulsar las cadenas productivas regionales, es otra alternativa. La matriz insumo-producto regional elaborada por la CEPAL, es un valioso instrumento para el sector oficial y privado, que es el que debe liderar el proceso.

http://diariouno.pe/columna/alianza-del-pacifico-un-alca-sin-eeuu/


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Apestado, se busca


Mirko Lauer


La ola de columnistas que vienen renunciando a sus medios para no trabajar al lado de un cuestionado locutor pone en evidencia los actuales alcances del activismo periodístico. En este caso, si los avisadores no quieren coexistir con el locutor cuestionado, entonces algunos de sus colegas tampoco.

La presencia de periodistas de posiciones distintas, y hasta contrarias, en un mismo medio ha sido correctamente percibida como un triunfo del gremio. En realidad es algo nuevo, que comenzó hacia el 2002, cuando Augusto Álvarez hizo de Perú 21 un crisol de posiciones contrarias, y de paso inauguró el actual auge de la columna de opinión.

Muchos de los demás medios, los más interesados en los equilibrios del liberalismo, replicaron la fórmula. Pero pocos, si alguno, de manera absoluta. Hasta hoy normas no escritas obligan a mantenerse dentro de principios constitucionales y, por supuesto, algo llamable la moral y las buenas costumbres en el espacio público.

Los jueces de esto han sido hasta aquí los directores en representación de los propietarios, y en verdad la lista de periodistas desterrados por la oficina de recursos humanos es larga. Sin duda César Hildebrandt es el decano en lo de perder dignamente el puesto por intentar ejercer una libertad periodística sin atenuantes.

¿Qué pasa con los periodistas que han dejado Exitosa y Willax TV para no trabajar al lado de Phillip Butters? ¿El principio de pluralidad en los medios se ha debilitado? ¿O Butters ha cruzado una raya que lo ubica de plano en el campo de lo inaceptable? Los dueños de los dos medios que lo están recogiendo de la calle no parecen pensar así.

Hay una diferencia entre no querer alternar laboralmente con Butters, algo perfectamente comprensible y hasta saludable, y negarle el derecho a expresar sus despropósitos, incluso a gritos, como le gusta hacerlo. Lo primero es una forma de cuidar un prestigio personal; lo segundo es atentar contra sus propios intereses como periodistas.

Las familias Wong y Capuñay acaban de subir a bordo de sus respectivos medios a un flamante vocero de la extrema derecha, con el cual esperamos que estén contentos, pues sin duda va a definir la imagen de sus negocios. Quizás para balancear las cosas podrían contratar voces y plumas en una posición divergente a la del cuestionado locutor.


http://larepublica.pe/impresa/opinion/855676-apestado-se-busca


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Corrupción y Neoliberalismo en el Perú (II)

Félix Jiménez


En nuestro artículo anterior sostuvimos la tesis de que la corrupción que sufre el país, es un proceso caracterizado por una conducta social y una práctica política que operan en el sentido del deterioro de la sociedad. Las instituciones que definen a una sociedad como comunidad política, se degradan. También dijimos que hay dos períodos en la historia moderna con este tipo de fenómeno sociológico: el GildedAge de los años 1800 a los años 1920, y el actual de Globalización Neoliberal que empezó a fines de los años 1970. En ambos se denostó contra el papel regulador del Estado y se promovió el mercado auto-regulado.

En esos períodos se transformaron a las instituciones en extractivistas, se subordinó el interés público al interés privado, se promovió la «carrera hacia el fondo», afectando a los trabajadores y aumentando la desigualdad en la distribución del ingreso.

LA CRÍTICA A NUESTRO CONCEPTO DE CORRUPCIÓN
Hay, como era de esperarse, destacados analistas para quienes este estado de degradación de la sociedad y de la democracia no es propio de la globalización neoliberal. Por más que el mercado esté regulado como lo estaba en la URSS y como también lo está ahora en China —dice por ejemplo Oswaldo de Rivero—, hay gran corrupción y esta no es un resultado del modelo neoliberal. Ilustra su afirmación señalando que en el Perú se «echó mano al tesoro público» desde el virreinato y en toda la República.

Primero, ni la fenecida URSS ni la China actual pueden ser ejemplo de regulación de los mercados. Estatización o control estatal de las inversiones, no es regulación. Segundo, la definición de corrupción que utiliza, es general.

Una descripción excelente de la práctica constante de aprovechamiento de los recursos y patrimonio del Estado, desde el poder político y en muchos casos con participación de intereses privados, es la que hace Alfonso Quiroz en su libro «Historia de la corrupción en el Perú»; sin embargo, tampoco trabaja el concepto que nosotros utilizamos.

No nos referimos a la corrupción en general, como acto ilícito y reñido con la moral. Para nosotros la corrupción que impera en nuestro país ahora –y que ciertamente lo incluye–, alude a un proceso sociológico colectivo de degradación. Hay un trastocamiento de la conducta social y política que afecta al conjunto de la sociedad, degradándola. Y, un proceso sociológico de este tipo no puede ser a-histórico. Tiene su propia especificidad.

Las instituciones extractivistas han existido desde la colonia, como por ejemplo el obraje; pero el extractivismo que hoy practican las AFP, los Seguros, las empresas extranjeras que usufructúan de concesiones en detrimento de la población y del medio ambiente, o lo que hacen las combis con el transporte en la ciudad, responden a la lógica del fundamentalismo de mercado que sobrepone el interés privado sobre el público. Este proceso de degradación colectivo no ocurre en una sociedad colonial, sino en otra donde impera el fundamentalismo de mercado.

PRIVATIZACIÓN DEL ESTADO Y DEGRADACIÓN DE LA DEMOCRACIA
El fundamentalismo de mercado y la ideología contra el papel regulador del Estado, se impuso en los últimos 35 años en el mundo desde el poder político, mediante cambios legales y constitucionales. Es global porque trata de convertir al conjunto de las naciones en un mercado gigante, mediante la apertura comercial y los tratados de libre comercio que operan en contra de la soberanía de los Estados Nacionales.

Con la globalización neoliberal, se reproduce, a escala mundial, comportamientos y prácticas rentistas (o de ganancia fácil) en la economía, en la política y en la conducta social. Se acrecienta la desigualdad en la distribución del ingreso y las injusticias sociales, se deteriora el medio ambiente y se violan los derechos de los pueblos originarios, al mismo tiempo que se degradan las instituciones de la democracia constitucional liberal.

Con el neoliberalismo, entonces, se impone el interés privado sobre el público, y la política se convierte en un ejercicio de marketing de las oligarquías políticas que compiten por llegar al poder del Estado comprando directa o indirectamente el voto. Los medios de comunicación también operan con la lógica del mercado, y no del interés público. Por lo tanto, el neoliberalismo es enemigo de la democracia.Las oligarquías políticas «roban pero hacen obras», y los votantes no son libres ni siquiera en el acto de votar porque han sido compradas sus conciencias.

En esta lógica privatista, las ganancias son siempre privadas, no importa como se obtengan, pero los riesgos (como en el caso de las famosas APP) se socializan. El Estado sale a rescatar a los bancos en crisis, por ejemplo, pero le quita derechos a los trabajadores y les impone la flexibilidad laboral. El Estado se ha privatizado o se ha impuesto un neoliberalismo de Estado, como dice Todorov. El Estado se pone al servicio de los intereses privados.

Cuando la actividad económica privada se convierte en global, «ya no está sometida al control político de los Estados. Todo lo contrario, dice Todorov. Son los Estados los que se han puesto al servicio de la economía.

Los Estados son, en efecto, tributarios de las agencias privadas de calificación, que orientan sus decisiones y a la vez quedan al margen de todo control político. Lo único que les queda de democracia es el nombre, porque ya no es el pueblo el que detenta el poder» (T. Todorov, Los enemigos íntimos de la democracia).

A MODO DE CONCLUSIÓN
La corrupción como degradación social, no puede ser entonces un fenómeno cultural, o una ceguera que impide distinguir entre patrimonio privado y el público.


http://diariouno.pe/columna/corrupcion-y-neoliberalismo-en-el-peru-ii/


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Intolerancia de género

Claudia Cisneros



“Váyase a la C…de su M…!” puso en un tuit el congresista fujimorista Tubino a una persona que le sugería alguna relación con la homosexualidad. Pero Tubino dice no ser homofóbico(https://t.co/FJe3LaBmKq). “Me llamo Javier, mi pareja se llama Francisco y soy arquitecto”, dice un hombre dibujado en una guía para maestros en la misma página donde hay hombres y mujeres dibujados que se presentan con sus profesiones o actividades en clara intención de enseñar a los niños la diversidad existente en la sociedad y que aprendan a respetarse entre sí por encima de dónde nacieron o viven, qué oficio tienen o si son gay o heterosexuales. Al señor Tubino esto le parece terrible. Pero, ojo, dice que no es homofóbico. Es un intolerante de género.

“Tengo amigos homosexuales pero no por eso voy a querer que mis hijos les enseñen sobre los homosexuales”, dicen los que aseguran no ser homofóbicos pero quieren invisibilizar al homosexual de la educación. Son intolerantes de género.

“Tengo derecho a expresar mi opinión”, dicen los que creen que denigrar, invisibilizar, discriminar a peruanos y peruanas cuenta como opinión. Quieren llamarle opinión a tratar como leprosos a homosexuales, llamándoles enfermos, fallados. Dicen que los respetan, siempre que se mantengan invisibles. Y así dicen no ser homofóbicos. Son intolerantes de género.

“O sea, si no pienso como tú, soy ignorante”, dicen tratando de defender su aversión a homosexuales. Como si discriminarlos fuera una opinión aceptable o siquiera una opinión. Desconocen lo elemental del género doblemente, porque no se enteran y si se enteran, pretenden desconocerlo. Aquí (https://goo.gl/xyhqpg), acá (https://goo.gl/roK8Bt) y acá (https://goo.gl/xyhqpg) hay información para quien quiera instruirse con pruebas, con ciencia que se basa en investigación, evidencias. Pero con tal de negar la existencia pública de homosexuales, elaboran las más delirantes teorías basadas en conocimientos no actualizados. Son intolerantes de género.

“¿Acaso si no quiero que en el colegio le enseñen a mi hijo que hay gays soy homofóbico? Sí. La homofobia es rechazo y aversión a la existencia y reconocimiento público homosexuales. Es intolerancia de género.

“Ahora resulta que la tolerancia es solo para los que piensan como uds. Tengo libertad de expresión”, dicen los que aseguran no ser homofóbicos y se quejan de que nosotros no somos tolerantes con ellos pese a exigirles tolerancia. Entiende: la tolerancia sirve para mantener la sociedad cohesionada y el respeto mutuo. Si un grupo en la sociedad pretende rechazar a otro grupo por fanatismo o falta de información actualizada, esos grupos hacen daño a la sociedad porque la separan, crean divisiones y discriminación injusta y la disfrazan de opinión. Es intolerancia de género.

Las ideas de las personas intolerantes sin base, crean injusticias diarias y no deben ser toleradas en una sociedad que se quiere construir en armonía y pluralidad. Y esa es la razón (y no una sarta de tontas teorías conspiranoicas) por la que existe un sistema político que promueve la inclusión diferenciada y el respeto a homosexuales. Porque las sociedades se construyen incluyendo. Y las políticas públicas, y la responsabilidad de un Estado de formar ciudadanos desde las escuelas, no se pueden basar en creencias de fe (que hay muchas) sino en ciencia, hechos y conocimiento actualizado. La tolerancia en la sociedad debe tener el límite de no tolerar al intolerante que quiere discriminar sino todo estaría permitido: denigrar, ser injusto, o matar. Así lo explicó el filósofo Karl Popper: “Si extendemos la tolerancia ilimitadamente a aquellos que son intolerantes, si no estamos preparados para defender la tolerancia de la sociedad contra la arremetida del intolerante, el tolerante será destruido y con él la tolerancia”. Por eso la intolerancia de género no debe ser tolerada. Porque es injusta, discriminatoria, y ejerce violencia real contra niños, adolescentes y adultos homosexuales por simple fanatismo, falta de conocimiento o miedos irracionales. No hay peor violencia contra la dignidad de un ser humano que pretender invisibilizarlo y denigrarlo. No a la intolerancia de género. Sí a la inclusión diferenciada y respeto a los homosexuales y heterosexuales por igual.


http://larepublica.pe/impresa/opinion/855683-intolerancia-de-genero


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La desigualdad ideal

Richard Webb


¿Toda desigualdad es indeseable? ¿Qué hacemos entonces con el mérito, el esfuerzo propio, el afán de superación, con el talento individual para algún trabajo, arte o deporte? ¿Deberíamos frenar toda esa energía individualista, castigando a sus dueños con impuestos y otras formas de redistribución, apostando sobre todo a la igualdad y a una sociedad más solidaria y políticamente sostenible? 

Un argumento para cortarle las alas al individualismo es que la desigualdad de hoy va mucho más allá de lo que puede atribuirse al mérito. La ventaja inicial que es fruto del logro individual termina siendo multiplicada por ayuditas ya no tan meritorias, especialmente la compra del poder político. Lo que empieza con la legitimidad de una recompensa al éxito propio se va convirtiendo en un resultado injusto, como es el caso con los niveles groseros de desigualdad que hoy existen en gran parte del mundo, ciertamente en el Perú, pero también en Estados Unidos e incluso en la hoy capitalista China.

La “desigualdad ideal”, entonces, no depende únicamente de los números de una distribución de ingresos. Depende además del origen de las diferencias, algunas con un alto grado de legitimidad. Además, la legitimidad depende también del uso que se da a los ingresos.

Un ejemplo del papel de la legitimidad fue la política redistributiva del gobierno de las Fuerzas Armadas entre 1968 y 1980. La expropiación fue mucho más agresiva con las haciendas que con las fábricas. La propiedad de los hacendados tenía un mínimo de legitimidad, por su imagen de gestión ineficiente y poca contribución para la economía nacional, y también por su historial de abuso de la población campesina. La idea de que en gran parte la hacienda era producto de robo reforzaba la impresión de extrema falta de legitimidad. En contraste, la propiedad de las fábricas gozaba de un aura de alta legitimidad, por su modernidad, su alta tasa de inversión, su papel estratégico en el desarrollo y por una historia de adquisición libre de los abusos de los hacendados.

Mi impresión es que la legitimidad de las ganancias que producen los negocios en el Perú, grandes y pequeños, ha venido aumentando durante las últimas décadas. A la vez, las políticas de expropiación y redistribución han casi desaparecido en el discurso político, por lo que cualquier propuesta redistributiva que buscara reducir nuestro alto grado de desigualdad debería formular nuevos argumentos de justificación. Un primer paso debería consistir en una aclaración filosófica de la ética de la redistribución. Un punto de partida podría ser el debate que se produjo hace medio siglo entre dos profesores norteamericanos de filosofía y ética, John Rawls y Robert Nozick. Cada uno formuló una teoría de la justicia económica buscando definir las bases para determinar una desigualdad ideal, dejando espacio para el mérito pero también para el valor de la libertad individual. La teoría de Rawls se inclinó más hacia la justicia del resultado final, la de Nozick más hacia la justicia del proceso y del valor de la libertad personal. Lo evidente es que el gran mal de la desigualdad y el gran valor de la libertad no son absolutos que existen en polos aparte. Al contrario, son valores que viven en estrecha vecindad.


http://elcomercio.pe/opinion/rincon-del-autor/desigualdad-ideal-richard-webb-noticia-1975312?flsm=1


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La obsesión de Ciro Alegría

Eduardo González Viaña


Lo aprecié más porque era capaz de hablar de igual a igual con un joven que apenas se iniciaba en la tarea de escribir.

—No tema. Si usted tiene una obsesión, escriba una novela, y si sus personajes se le aparecen en medio de los sueños, hágase amigo de ellos.

Me lo dijo Ciro Alegría. Se acaban de cumplir cincuenta años de su fallecimiento y, a modo de recuerdo, me he pasado todo el mes en mi casa de Salem transportando los personajes y la acción de un cuento pequeño hacia un espacio mayor. Hace media hora he terminado de escribir la novela que me propuse.

Por eso, quiero recordar el lugar y el momento en que me dio ese consejo uno de los escritores que más ha influido en mi vida.

En 1963, cuando aún no había terminado mis estudios universitarios, comencé a trabajar como periodista de la sección Locales en “Expreso” de Lima. Llegaba al diario como el resto de mis colegas a las ocho de la mañana, esperaba a que me dieran las dos o tres comisiones del día y me iba de inmediato a cumplirlas. Regresaba tarde en la tarde para escribir la noticia.

En esos días, el gran novelista estaba en el Perú y, entre otras actividades, colaboraba en “Expreso”. Su tarea consistía en convertir “El mundo es ancho y ajeno” en una historieta gráfica que se publicaba un día por semana. Lo asombroso es que la famosa novela era insertada en la contratapa del periódico en vez de la página de deportes… y el público a pesar de ser tan futbolero no había protestado por eso.

Esa era la razón por la cual no paraba yo de coincidir con ese caballero que llegaba corriendo y mostraba al dibujante los garabatos que representaban a sus personajes.

Era Ciro Alegría. Tenía el pelo revuelto. Era un poco más delgado de como me lo imaginaba. El saco del terno le bailaba.

A pesar de que el caballete del dibujante estaba al lado de mi escritorio, nunca me había acercado a saludarlo porque siempre parecía él estar deprisa o porque acaso soy un poco tímido.

Quien lo hizo fue él. Estaba explicándole al dibujante cómo era la ropa de Rosendo Maqui cuando de pronto volteó hacia mi escritorio y me preguntó:

—¿Viene usted de Trujillo?

—¿Por qué lo sabe?

Señaló con el dedo el periódico que yo tenía sobre la mesa. Era “Norte”. Me lo habían enviado mis amigos de allá. Alegría recorrió las páginas del tabloide que entonces se hacía en tipografía y encontró un artículo mío al lado de mi foto.

—Parece que tenemos muchas cosas en común—me dijo. También yo trabajé en “El Norte” y estudié como usted en la Universidad de Trujillo…

Felizmente yo había terminado mis tareas del día. Alegría era un infatigable conversador. Hablamos de nuestra Alma Mater, de los intelectuales de su época, y sobre todo de Antenor Orrego y de César Vallejo, quien fuera su profesor de primaria.

A propósito de ello, en el artículo acerca de cómo conoció al poeta, Ciro dice que Vallejo comenzó las clases diciendo: “NIÑOSH LA TIERRA ESH REDONDA COMO UNA NARANJA”… A mí me pareció que el habla del novelista era muy similar a la de su maestro.

Me conocía la historia del hombre que hablaba conmigo. Admiraba su coraje durante la revolución popular de 1932. Me sorprendía su empecinamiento en una causa perdida. Me maravillaba que hubiera podido escribir incluso en la celda de la cárcel cuando estaba condenado a muerte.

Pero esta vez, lo aprecié más porque era capaz de hablar de igual a igual con un joven que apenas se iniciaba en la tarea de escribir, y por eso fui capaz de narrarle algunas cuitas que había experimentado en el oficio como la repetición del personaje o del ambiente.

—¿Sabe usted cómo escribí “La serpiente de oro”?… Reescribiendo mi cuento “El Marañón”. Lo reescribí varias veces, y por eso insisto: Si usted tiene una obsesión, escriba una novela… ¡Escríbala!… Y yo me he visto obligado a seguir ese consejo.

http://diariouno.pe/columna/la-obsesion-de-ciro-alegria/


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Lo que Trump no puede predecir

Ian Bremmer


Mientras los líderes mundiales se preguntan si Donald Trump iniciará guerras comerciales contra China y México, socavará la OTAN o arremeterá en contra de gran parte del mundo musulmán, se ha vuelto cada vez más claro que el pobre estado de la economía estadounidense debería preocupar a la comunidad internacional casi tanto como los defectuosos planes de política exterior del presidente. Estados Unidos sigue siendo el hogar del mayor consumo del planeta y es probable que Donald Trump estimule su crecimiento. Pero eso no solucionará las dificultades subyacentes a la economía, y es un problema para la economía mundial.

Los titulares cuentan una historia engañosa. Los mercados bursátiles continúan escalando alturas récords. El discurso de Trump ante el Congreso hizo que las acciones subieran aun más ante la esperanza de que un plan para reducir drásticamente los impuestos corporativos y gastar un billón de dólares en infraestructura impulse el crecimiento de Estados Unidos. El multimillonario Warren Buffett predijo recientemente un auge y respaldó su opinión con nuevas inversiones. Tiene razón en que las acciones estadounidenses tienen espacio para prosperar, pero eso no ayudará a los votantes de clase media que han perdido su poder adquisitivo –y en muchos casos sus empleos– en los últimos años. En otras palabras, a los votantes que animan a Trump de hacer a su país ‘great again’.

La pérdida de empleos manufactureros durante la pasada generación ha tenido un impacto particularmente complejo en Estados Unidos. Como Nicholas Eberstadt señaló recientemente en un poderoso artículo para la revista “Commentary”, “el crecimiento per cápita en Estados Unidos fue, en promedio, menos de 1% al año” del 2000 al 2016. Esto representa una fuerte caída en comparación con el 2,3% de crecimiento anual que se disfrutó de 1948 al 2000. Por otro lado, Trump acierta en decir que la tasa de desempleo oficial en Estados Unidos es engañosa porque no incluye el creciente número de estadounidenses en edad de trabajar que han dejado de buscar activamente trabajo. No por casualidad la adicción a las drogas, tanto legales como ilegales, se incrementó durante la generación pasada. Eberstadt cita un estudio realizado en el 2016 por Alan Krueger, ex presidente del Consejo Presidencial de Asesores Económicos, que encontró que casi la mitad de los hombres estadounidenses en edad de trabajar que están desempleados ahora toman analgésicos a diario. Entre esta legión de ciudadanos descontentos hay una demanda de cambio en el sistema. Trump ha prometido entregarlo.

Sin embargo, los legisladores que se preocupan por la deuda se asegurarán de que las promesas de Trump de invertir sumas históricas para mejorar las carreteras, puentes, puertos y aeropuertos tarden en cumplirse más de lo que él espera y se desarrolle un paquete más pequeño de lo prometido. Además, el nuevo presidente no cumplirá con los planes más ambiciosos de recortar bruscamente la tasa impositiva corporativa. De hecho, el Congreso no logrará mucho hasta que Trump y los líderes del Partido Republicano encuentren una manera de terminar con credibilidad el programa de salud de Obama sin despojar a millones de votantes de su seguro de salud, suponiendo que eso sea posible.

Trump gastará mucho más en el Pentágono, aunque el nuevo dinero no cambiará su opinión de que el poderío militar estadounidense debería ser utilizado exclusivamente para avanzar en los intereses comerciales y de seguridad. Al menos en el corto plazo, el comercio no volverá a estar en la agenda. Los megaacuerdos con socios asiáticos y europeos están muertos. Los posibles acuerdos con Gran Bretaña y Japón tomarán años en ser negociados. Nuevos acuerdos resultan improbables, al menos por ahora.

También es inevitable que, tanto en Estados Unidos como en otros lugares, se pierdan empleos con los avances de la automatización y la expansión de la inteligencia artificial. Un estudio de la Universidad Estatal Ball reveló en el 2015 que la automatización y los factores relacionados, y no el comercio, representaban el 88% de los trabajos perdidos en el sector manufacturero. Asimismo, la inteligencia artificial está reduciendo rápidamente el número de empleos en el sector de servicios. Más de la mitad de los empleos en el sector minorista podrían perderse y dos tercios de los empleos en los sectores de finanzas y seguros probablemente desaparecerán cuando las computadoras sean capaces de entender el lenguaje humano a la perfección, según el estudio. Ese podría ser el mayor obstáculo para los planes de Donald Trump de dar trabajo a los votantes de clase media y trabajadora.

La frustración económica hará que Estados Unidos sea un actor internacional menos predecible, ya que Trump ha persuadido a sus partidarios de que los otros países, como China y México en particular, tienen la culpa de “quitar” empleos de Estados Unidos y que algunos aliados están sacando provecho del apoyo del ejército estadounidense. Si la economía estadounidense continúa generando crecimiento y riqueza sin empleos –y más estadounidenses de clase trabajadora se sienten olvidados– la búsqueda de chivos expiatorios por parte de Trump se convertirá en una parte aun más importante de sus políticas de comercio exterior.

Como si Donald J. Trump no fuese lo suficientemente impredecible.

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Pensar y razonar antes de obrar

Guillermo Giacosa


La desinformación expresa la ausencia de una conciencia crítica que filtre la avalancha de mentiras, imbecilidades, e intereses políticos y económicos que se mueven detrás.

Un antropólogo proponía, lúcidamente, un imposible: leer el diario cada 5000 años. Era esa la única manera, según él, de poder tomar conciencia del progreso de la humanidad. Regreso a este recuerdo debido a las movilizaciones populares en Perú pidiendo que no se enseñe a cambiar de sexo y otras cosas que tampoco entendí muy bien. Quienes se oponían a la ley hacían que sonara a perversa alquimia medieval eso de cambiar de sexo a voluntad y reaccionaron ante ello como personas del medioevo.

Parecía que un grupo de gente desconsiderada –esto no se ha dicho pero no es ajeno- estaría promoviendo actividades sexuales no reproductivas. Es decir actividades que sin quitar entretenimiento y placer no producen resultados sobre el aumento poblacional.

Eso es contrario al “Creced y multiplicaos” bíblico que fue escrito cuando el planeta no había tomado en cuenta nuestra mutación de “obra suprema del creador” a la de patrocinadores y actores de plagas que amenazan todas las formas de vida en un planeta que creíamos el centro del universo y que no es más que un grano de arena perdido en el espacio infinito. Grano de arena que, según algunos, es el preferido de Dios y por tanto envió a su propio hijo para que salvara a los habitantes de dicho grano de arena.

Es decir Dios creó un universo, posiblemente infinito, y estableció relaciones con un planetita bello pero insignificante. A Giordano Bruno lo quemaron vivo, como lo haría ese pastor gordo que pide matar lesbianas y zoófilos, porque dijo que era absurdo que Dios, habiendo creado todo el universo, estableciera relaciones especiales con una parte de él. Se refería, también, a esa idea precaria e infantil de “pueblo elegido” que, si bien en ese caso se enfocaba en los hebreos, es un pensamiento que se repite en casi todas las culturas.

Eso al extremo que muchos pueblos llamaban mudos a los que no sabían hablar su idioma y el mismo Colón los consideraba mudos a los pueblos originarios de América por no entender el castellano de los conquistadores.

En la actualidad los gringos hablan de “destino manifiesto” que sería algo así como una responsabilidad especial que Dios les encomendó a ellos y debido a tan severo compromiso se pasan el día produciendo bombas, misiles, drones asesinos y todo aquello que pueda destruir a los enemigos del dios que les hizo el encargo, incluidas mil bases militares por todo el mundo con ángeles de la guardia propios.

En el Siglo XVII Gracián decía: “Hombres sin noticias, mundo a oscuras”. Hoy podríamos decir seres humanos manipulados por la información, mundo caótico y tierra fértil para los fanatismos y la intolerancia.

La desinformación existente expresa la ausencia de una conciencia crítica que filtre por la propia racionalidad la avalancha de mentiras, imbecilidades, e intereses políticos y económicos que se mueven detrás del caos mental que parece imperar en parte importante de la población.

Los medios de comunicación tienen una cuota significativa de culpa. Han contribuido y contribuyen, en muchos casos, a despertar y revitalizar los envenenados prejuicios larvados que habitan nuestro inconsciente. Son pequeñas bombas de tiempo que, sumadas, pueden provocar situaciones de las que sería difícil regresar. Como en política pareciera que todo vale, el compromiso moral es el gran ausente y cada cual juega su juego apostando a posibles beneficios futuros.

Podrían algunos estar comenzando su carrera política a partir de esta indigesta confusión que separa y aísla pues juega con emociones muy sensibles del imaginario humano. El mandato biológico fundamental es preservar la vida y esa preservación, en la parte más antigua de nuestro cerebro, tiene que ver con nuestra progenie. Es decir con nuestra descendencia. Y es en ese terreno en donde, con distintos disfraces, se ha instalado la discusión. El disfraz lo inventa cada uno y está vinculado a sus miedos más profundos.

Hemos sacudido un avispero por falta de olfato político por un lado y por manifiesta mala voluntad por el otro. Devolver las avispas a la colmena no será sencillo pues no son pocos los que se benefician con el desorden y la sordera que se ha sembrado.

Quisiera agregar, como un dato para la reflexión (si es que ella aún es posible), que la especie humana a la que pertenecemos, llamada Homo sapiens, es la que ha triunfado sobre otras especies también humanas como los neandertales (que figuran en nuestro ADN), los denisovanos, el Homo erectus, el Homo rudolfensis, el Homo soloensis y otros más.

¿A qué grupo pertenecían Eva y Adán, en caso de que hubieran existido? Imposible saberlo. Lo que sí sabemos es que nuestro cerebro cuenta con cien mil millones de neuronas y que cada neurona puede hacer de una a diez mil conexiones con otras neuronas por tanto la capacidad potencial de nuestro cerebro es de 10 elevado a la billonésima potencia.

La cifra merece un par de pregunta más: ¿Si Dios o la Naturaleza nos dio semejante capacidad será para que demos fe a la primera tontería que nos cuentan o para que pensemos por nosotros mismos? ¿Será para que nos dejemos llevar de la nariz por los fanáticos o para que razonemos?

Usted decide y para decidir debe informarse en distintas fuentes, leer, escuchar opiniones diferentes a la suya y, finalmente, si aún le queda aliento, razonar.


http://diariouno.pe/columna/pensar-y-razonar-antes-de-obrar/


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Sarna con gusto

Rosa María Palacios


La ceguera y desorientación del presidente, de sus ministros y congresistas no puede ser mayor. De otro lado, las declaraciones de Keiko Fujimori, el jueves pasado en la celebración del sétimo aniversario de la última versión política del fujimorismo, no pueden ser más claras. El contraste de ambas propuestas políticas en definición de objetivos y línea de gestión deja en muy mal camino a lo queda –si queda mucho– de este gobierno.

Fujimori ha dicho que el presidente “debería estar” en funciones. De lo que se deriva que no lo está y, por tanto, el poder presidencial está vacante o está usurpado. Vacante porque el presidente “está metido en la piscina del club El Golf mientras la población sufre” por los trastornos de un exceso de lluvias que nadie pudo advertir. Eso no es todo lo que ha dicho Fujimori. Se ha lanzado un discurso en defensa de los procuradores anticorrupción que ya lo hubiera querido escuchar José Ugaz o Luis Vargas Valdivia, perseguidos por el mismo fujimorismo que ellos llevaron con eficacia a juicio. ¿Cómo has cambiado pelona? Nada de eso. Es la misma, aprovechando que los procuradores son hoy sus aliados. No en vano ha hecho notar que al ministro Vizcarra lo han acusado “con pruebas”. ¿Qué pruebas hay del delito de colusión? Ninguna. Chinchero es a Vizcarra, lo que las computadoras a Saavedra. Una excusa.

A Fujimori y a García Belaunde, otro aliado circunstancial, les conviene una vacancia pronta. Acumular excusas que parezcan potables es el camino más rápido antes de que Julio Guzmán o Verónica Mendoza consigan una inscripción partidaria. Fujimori cree que puede llegar a la Presidencia (que sostiene le robaron) por esta vía y García Belaunde cree que podrá aglutinar a todo el antifujimorismo tras Barnechea. Con un presidente en caída libre en las encuestas hay que moverse más rápido y lo están haciendo.

Fujimori tiene, además, que demostrar que puede neutralizar a su díscolo hermano –quien no asistió a la celebración partidaria– tras varios arrebatos de independencia que se manifestaron desde el día en que no fue a votar por ella, hasta esta semana, en que declaró, vía twitter, el comportamiento “nauseabundo” de su bancada respecto a la negativa de investigar la pedofilia en el Sodalicio. Kenji puede ser su peor enemigo si le parte la votación nacional y es una amenaza cada vez más abierta. Tampoco se le puede permitir que logre una inscripción propia.

¿Cómo se está parando el gobierno en este escenario tan claro? Sin ninguna idea de que le están pasando el viejo tractor de Alberto Fujimori por encima de ida y vuelta. Vizcarra quiso renunciar el martes pasado para salvar al presidente de su censura e inhabilitación como vice presidente. El presidente y el Consejo de Ministros no se lo permitieron porque están seguros de que “no hay ánimo” para una censura. Como lo leen. Los congresistas de PPK creen lo mismo. ¿No hay ánimo? Hay una guerra abierta y declarada. Lo de Saavedra y la mototaxi fue un ensayo que salió bien. Como lo fue los pisthacos de Huaycán (robaban órganos a los niños) antes de la marcha contra el gobierno “por homosexualizar a los niños”. Mover a la gente a través de sus miedos es muy fácil y lo están logrando.

Con el mismo candor con que mandaron a Saavedra al matadero, va esta semana Vizcarra al Congreso. Convencidos de que los parlamentarios quieren “conocer aspectos técnicos”. Dan pena. Lo que el Congreso fujimorista quiere es enseñar cabezas de los “verdaderos corruptos” de los cuales, por contraposición, nos van a salvar con una vacancia presidencial. Todo suma. Unos ministros corruptos, un presidente en la piscina, un gobierno “homosexualizador” de niños, lo que agregue a la vacancia lo pondrán encima.

Las palabras que Fujimori, que vacaron de facto al presidente Kuczynski, ¿no merecían una respuesta firme del propio presidente? No lo hizo. Le encargaron a Sheput y a Bruce responder. Entre el miedo, la negación de lo evidente y los que se preservan para sobrevivir a la debacle, el gobierno enmudece y pone el cuello para que se lo corten.

Que no se diga que no se les advirtió no una sino cien veces. Los afanes golpistas de Fujimori son deleznables, pero cuentan con la activa colaboración de su víctima. Así, sarna con gusto, no pica.


http://larepublica.pe/impresa/opinion/855678-sarna-con-gusto


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Urge un debate nacional

Enrique Fernández-Maldonado Mujica


Los anuncios hechos por el ministro de Trabajo, Alfonso Grados Carraro, en torno a una reforma laboral que se aprobaría a mediados de año, no han merecido mayor análisis en medios. Esta se daría al amparo del objetivo del gobierno de impulsar la formalización empresarial y laboral. Aunque lo expuesto hasta el momento deja varios cabos sueltos y no pocas preocupaciones.

El ministro ha sido escueto en sus declaraciones. Si bien no ha explicitado cuál será el enfoque que aplicará el gobierno, su intención de “facilitar el ciclo laboral” (contratación y cese de personal) se asemeja demasiado al discurso empresarial exigente de una mayor flexibilización y desregulación laboral. El problema con este enfoque –que se aplica sin corta pisas desde la década de 1990– es que ha fracasado en sus objetivos de impulsar el empleo formal y de calidad.

A la fecha el Ejecutivo de PPK ha aprobado cuatro decretos legislativos denominados de “simplificación administrativa”. Estos eliminan una serie de garantías para el trabajador; particularmente las referidas al registro de los contratos y su autorización por la Autoridad de Trabajo en el caso de las modalidades especiales (formación juvenil, extranjeros, prácticas profesionales).

El MTPE ha presentado, además, tres iniciativas de ley al Consejo Nacional de Trabajo (CNTPE) para que sean opinadas por los actores sociales, antes de su aprobación –según indica Grados– en el mes de julio. Estos proyectos apuntan a modificar la legislación en materia de ceses colectivos, arbitraje potestativo y formalización laboral.

Los gremios sindicales y empresariales ya plantearon su oposición y respaldo, respectivamente, a las medidas propuestas por el Ejecutivo (Acta CNTPE N° 332, del 14/02/17). Lo mismo que un conjunto de especialistas en la materia, en carta pública al Ministro de Trabajo (trabajodigno.pe, 22/02/17).

El gobierno debería propiciar un debate público sobre el alcance de estas iniciativas. Mal haría en aprobar una política laboral nacida de la imposición, el hermetismo y sin respaldo social. Desde esta columna (que cumple un año) proponemos una Conferencia Nacional de Trabajo para discutir estos temas.


http://diariouno.pe/columna/urge-un-debate-nacional/

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