El autoestrangulamiento - Richard Webb
El gran proteccionista - Raúl Tola
El Señor de la Corrupción: ni un mes más - Eduardo González Viaña
Encuentro o encontrón - Augusto Álvarez Rodrich
La democracia secuestrada - Jorge Millones
La prensa incómoda - Alfredo Torres
Personal de confianza - Enrique Fernández-Maldonado Mujica
Qué hacer en la amazonía en 2017 - Róger Rumrrill
¿Qué te pasa Occidente? - Guillermo Giacosa
Reformas - Eduardo Dargent
_______________________
Decretos legislativos, Odebrecht y declaraciones
presidenciales
Alan Fairlie
El pasado 29 de
septiembre del 2016, el Congreso de la República le otorgó facultades al
Poder Ejecutivo en materia de reactivación económica y formalización,
seguridad ciudadana, lucha contra la corrupción, agua y saneamiento y la
reorganización de Petroperú S.A, entre otros aspectos.
El plazo concluyó
el 6 de enero del 2017 y a la fecha se han emitido un conjunto de decretos
que buscan impulsar la economía, combatir la corrupción y la delincuencia,
así como mejorar la provisión y la calidad de los servicios básicos como agua
y saneamiento.
DECRETOS
ECONÓMICOS
Uno de los
aspectos más comentados han sido las normas tributarias y la simplificación
administrativa mencionada en los textos aprobados.
En el primer
grupo, se encuentran Decretos, como el 1269 que establece el nuevo régimen de
las MYPE para el Impuesto a la Renta, el Decreto 1263, que modifica el código
tributario y entre otros cambios, elimina la aplicación de intereses por
exceso de plazos. También está el decreto 1258, que modifica la ley del Impuesto
a la Renta.
En el segundo
grupo, se encuentran normas como las que autorizan el uso de tecnologías de
la digitalización, información y comunicación en procesos laborales y otros,
como son la sustitución de la firma ológrafa y sello por la firma digital
(Dec. 1310), la regulación de la propiedad intelectual (Dec. 1309), la
eliminación de las barreras burocráticas (1256) y la modificación de la ley
del procedimiento administrativo general y derogación de la ley de silencio
administrativo (1272), entre otras.
Por su parte, el
área de agua y saneamiento, presenta iniciativas como Agua más (Agua+) que
consiste en ejecutar acciones de intervención, rehabilitación, reposición,
operación y mantenimiento de los sistemas de agua y saneamiento en el área
rural del país (Dec. 1274), o como la creación del Fondo de Inversión para
Agua Segura (Dec. 1284) o la norma que aprueba la ley marco de la gestión y
prestación de los servicios de saneamiento (dec. 1280), entre otros.
A nivel de la
política fiscal, se tienen los Decretos 1275 y 1276 que establecen el marco
para un adecuado uso de los recursos fiscales de los gobiernos regionales y
locales, así como del sector público no financiero.
En materia del
sistema financiero y mercado de valores, están los decretos que regulan
modificaciones a la ley del fomento a la liquidez e integración del mercado
de valores y modificaciones a la ley de bancos.
Para el caso de
Petroperú, se ha publicado el decreto 1292, que declara de necesidad pública
y de interés nacional la operación segura del oleoducto norperuano y dispone
la reorganización y mejora del Gobierno Corporativo de la citada entidad.
Se trata de normas
que según el gobierno, han sido elaboradas para beneficiar al ciudadano de a
pie, al pequeño y mediano empresario, pero sobre todo para generar mejores
posibilidades al país en su conjunto. El enfoque es que eliminando trabas y
reduciendo trámites, se beneficia a diferentes sectores de la población y
debe reactivarse la inversión en el corto plazo. Asimismo, iniciar una
reforma del Estado de mayor alcance.
Se requiere un
análisis detallado de las medidas, y cuidar que por esta promoción no se
están relajando estándares laborales, ambientales o afecte la biodiversidad y
patrimonio cultural de la Nación.
DECLARACIONES
PRESIDENCIALES
El Presidente ha
resaltado la importancia de las medidas que el Premier y los ministros del
sector correspondiente han presentado al país. Tiene la expectativa que con
esas medidas y las políticas de “destrabamiento” de grandes proyectos de
inversión, la economía recupere un crecimiento del 4% este año.
Ha defendido la
necesidad del ajuste fiscal del último período, para que la situación no se
vaya de las manos. También están generando deuda externa crecientemente, por
lo que necesitan que las clasificadoras de riesgo no empeoren nuestra
calificación y suba la tasa de interés (aunque igual ocurrirá por política de
la FED). Hemos argumentado en otros artículos, sobre las limitaciones de esta
estrategia.
Lo que nos
interesa resaltar es que quizá esa situación preocupante, haya llevado al
Presidente a declarar que deben salir proyectos mineros que no tienen
licencia social, y que las poblaciones locales cuestionan. En un contexto
adverso internacionalmente, con dificultades de retomar crecimiento de manera
sostenida, insistir en proyectos cuestionados, puede ser una provocación que
reinicie los conflictos sociales.
Hay medidas sobre
corrupción y seguridad ciudadana que no comentaremos, pero sí el contexto, el
destape del caso Odebrecht.
ODEBRECHT
La dimensión
internacional del escándalo, y las repercusiones locales que abarcan varios
gobiernos, hicieron palidecer las medidas anunciadas. No solo por la reacción
tardía y débil frente al hecho, el intento de relativización de PPK (son
algunos, no toda la empresa), sino también por tratar de soslayar la
participación de empresas y actores locales.
Es mucho lo que
está en juego en el caso Odebrecht. No solo ingentes cantidades de dinero, y
los correspondientes intereses empresariales que serán defendidos a toda
costa. También porque la magnitud del fenómeno pone en cuestión al conjunto
de la clase política, y las mismas bases institucionales de la República.
En ese contexto,
anuncios de lucha contra la corrupción no tienen la credibilidad necesaria, y
se requieren acciones concretas que no se sabe si están en condiciones de
implementar.
En ese clima,
medidas de piloto automático no funcionarán para reactivar la economía y la
inversión de largo plazo. Se requiere cambios de corto plazo y en la
estrategia de inserción internacional y de desarrollo, que este gobierno no
implementará.
Persistir en las
medidas anunciadas en las declaraciones presidenciales, no complementa o
corrige deficiencias de los decretos legislativos. Es el anuncio de nuevas
tempestades. Esto es muy peligroso dado el humor ciudadano que se ha
manifestado recientemente, en protestas por un injusto peaje. Peor aún si el
escándalo Odebrecht, alcanza a los protagonistas de las más altas esferas del
Estado.
Se requiere que
desde todos los sectores trabajemos por revertir estas tendencias, y
reconstruir la República sobre nuevas bases. Se requiere una gran
concertación nacional para implementar políticas de Estado, que lleven a un
mayor bienestar a la población, sobre todo la menos favorecida. Ni nuevos
decretos legislativos, ni el Acuerdo Nacional con las atribuciones actuales,
resolverán el problema.
_____________________
El autoestrangulamiento
Richard Webb
En una misma
semana las noticias nos pusieron de cara con dos manifestaciones de demencia
relacionadas al tráfico: una de carácter científico, la otra, un desborde en
las calles. La mayor sorpresa fue descubrir que, a pesar de tratarse de
fenómenos en un mundo aparte, ambos se encontraban relacionados el uno al
otro.
La primera noticia
fue la publicación de un estudio estrictamente científico realizado en
Canadá, en el que se hizo seguimiento a dos millones de personas a lo largo
de once años para estudiar la posible relación entre la frecuencia de la
demencia, en sus varias formas, y la distancia entre la residencia de cada
persona y una carretera. Los resultados del estudio fueron publicados en
Londres por la prestigiosa revista médica “The Lancet” y rápidamente
comentados por expertos y medios. La conclusión principal del estudio fue
confirmar la existencia de una relación. Los que vivían a menor distancia de
una de las grandes vías del tráfico tenían un 12% de mayor probabilidad de
contraer Alzheimer u otra enfermedad asociada al deterioro del cerebro. El
estudio no investigó los mecanismos que vincularían la cercanía al tráfico
con el daño cerebral, pero desde hace algún tiempo diversas investigaciones
han venido descubriendo que la contaminación del aire y el ruido se
encuentran asociados con una pérdida de la materia blanca del cerebro cuyas
funciones incluyen la conexión interna de los distintos componentes de ese
órgano. Debemos considerar, además que, si en un país ordenado como es Canadá
la cercanía a las vías principales perjudica al cerebro, es probable que el
caos vehicular en el Perú tenga un efecto dañino aún mayor.
La segunda noticia
consistió en las protestas de los vecinos de Puente Piedra ante el cobro de
un peaje. Pero el carácter demencial de esa protesta no se limitaba a la
violencia y destrucción vívidamente graficadas por la televisión. La
verdadera demencia, en mi opinión, está en la larga indiferencia e
imprevisión de las autoridades encargadas del ordenamiento urbano que han
llevado a una situación de absurdo maltrato a un gran número de personas que
deben sufrir no solo la contaminación, el ruido y los riesgos a la vida
producidos por el fuerte tráfico de una carretera que cruza sus barrios
residenciales, sino, además, ahora, el costo de un peaje que jamás debe
existir para el tráfico estrictamente urbano. ¿Cuál sería la reacción a la
implantación de peajes para el tráfico en la Av. Javier Prado o la Av.
Benavides que cruza de Miraflores a Surco?
La conectividad es
un instrumento de extraordinario valor económico, pero también para la
calidad de vida. Pero el logro de esos beneficios requiere no solo de una
buena planificación, sino además de un ordenamiento continuo con mano fuerte
de las autoridades para impedir la tendencia al autoestrangulamiento que
caracteriza a los caminos. Es que la extraordinaria ventaja de la ubicación
junto a una arteria estimula una reubicación de personas y negocios a lo
largo de los caminos, como ha sucedido en las principales carreteras y
también en los pequeños caminos del interior. Todos corren para aprovechar la
ventaja, creando congestión y, al final, la cancelación del beneficio
original. Es evidente entonces la necesidad de que las autoridades no solo
sean capaces, sino también firmes para mantener la fluidez de la vía. Una
autoridad débil es, al final, también, una forma de demencia.
http://elcomercio.pe/opinion/rincon-del-autor/autoestrangulamiento-richard-webb-noticia-1959011
_____________________
El gran proteccionista
Raúl Tola
Las matonerías de
Donald Trump no han parado luego de ganar las elecciones de los Estados
Unidos; por el contrario, sus amenazas, disparates y extravagancias, que
causaban entre risa y temor en campaña, ahora tienen un agravante: producen
consecuencias reales.
Su última escalada
comenzó con un mensaje en Twitter contra General Motors, el mayor fabricante
de autos de Norteamérica. Trump lo amenazó con imponer tarifas más altas a
los vehículos que importa de México, si sigue trasladando la producción a ese
país. Hay que recordar que en campaña el candidato republicano planteó
establecer un arancel de 35% a los autos importados, para desincentivar la
partida de empleo a países con trabajadores más baratos.
Aunque GM
respondió asegurando que su producción mexicana es marginal dentro del
mercado estadounidense, las amenazas del presidente electo fueron oídas por
Ford. El otro gigante automotriz del país reaccionó de inmediato, cancelando
una inversión de cerca de US$ 1.600 millones para una planta en San Luis de
Potosí, produciendo un incendio en la economía mexicana, muy tocada por el
incremento del gasto público del gobierno de Peña Nieto, con el peso
alcanzando un nuevo mínimo histórico.
Ahora Trump
intenta intimidar a Toyota, que planea abrir una planta automotriz en México,
para ensamblar su modelo Corolla: «Toyota dice que construirá una planta en
Baja, México, [en realidad, se trata de Guanajuato] donde construirá autos
Corolla para los Estados Unidos. ¡Ni hablar! Construyan la planta en EEUU o
pagarán un gran impuesto fronterizo». Aunque el fabricante japonés se ha
mantenido desafiante, y asegura que no se dejará manipular, analistas
financieros estiman que, de subsistir las presiones, la inversión extranjera
en México podría contraerse hasta en un 15%.
Pero las
barbaridades del presidente entrante no se limitan a la economía. Esta
semana, en un bien informado artículo publicado en The New York Times, James
Risen y Sheri Fink reflexionan sobre las consecuencias que comienzan a tener
en el mundo las posturas que Donald Trump expuso en campaña sobre los
Derechos Humanos. Recordemos que dijo que la prisión de Guantánamo debía ser
llenada de «malos tipos», y aseguró que para conseguir que confesaran sus
crímenes reviviría el empleo de torturas, empleando mecanismos incluso peores
que el «waterboarding» (ahogamiento con una toalla sobre el rostro, a la que
se echa grandes cantidades de agua). Si el líder de la mayor potencia de
occidente legitima esta barbaridad, ¿qué se puede esperar que digan los
autócratas del mundo?
Donald Trump
alcanzó la presidencia de los Estados Unidos apoyándose en el lema «Make
America great again» («Hagamos a América grande otra vez»). No deja de
sorprender la enorme inconsistencia en el discurso de este millonario
fanfarrón, estrafalario e inculto, cuyas convicciones políticas parecen
fluctuar junto con sus niveles de testosterona, y que parece haber
descubierto que el único camino para sacar adelante a su país es la
permanente traición de todos los principios que lo hicieron grande alguna
vez, como el libre mercado y la defensa del individuo. Comenzamos a
experimentar los desarreglos que su imaginación delirante y su personalidad
mesiánica anticipaban en campaña. Y todo esto, sin que su gobierno empiece.
http://larepublica.pe/impresa/opinion/837386-el-gran-proteccionista
_____________________
El Señor de la Corrupción:
ni un mes más
Eduardo González Viaña
Cuando José María
vio que los soldados chilenos se acercaban, no intentó huir. La herida en la
pierna derecha se lo impedía.
Semitendido sobre
la arena del morro de Chorrillos, observó que los invasores estaban rematando
uno por uno a los peruanos heridos.
Faltaban tres
muchachos de su edad para que llegaran hasta él, pero José María sonrió.
Cuando el soldado
alzaba la lanza para perforarle el vientre, tuvo tiempo para gritar pero
estaba ronco.
Tenía 16 años.
Había llegado desde Miraflores caminando para unirse a los defensores de la
patria. No había hecho jamás ejercicios militares, pero creía que de todas
maneras podía ser útil.
El chileno de la
lanza se detuvo asombrado al mirarle la cara.
—¡Eres una
guagua!-dijo.
Volteó el rostro
para pedir instrucciones a su superior:
—No es militar. Es
un voluntario y es una guagua.
Pero el muchacho
continuó sonriendo. Tal vez pensaba que en el sitio donde había caído, sus
compatriotas erigirían alguna vez un monumento a los héroes anónimos como él.
Apenas tuvo
segundos para pensar. El soldado le hundió varias veces la lanza en el
vientre y lo hizo con ferocidad caritativa “para que la guagua no sufriera”.
Si José María
estuviera hoy de veras sufriría. Estamos en enero de 2017, exactamente a 136
años de su sacrificio, pero en vez del altar que soñó, un monumento al
latrocinio y a la corrupción se alza sobre la tierra donde cayeran 2 mil
mártires peruanos.
Se trata del
denominado “Cristo del Pacífico”, y de Cristo no tiene nada. Es una cruz de
resina de poliéster armada sobre estructura metálica y erigida, sin consulta
previa, por el presidente Alan García con el auspicio de la firma brasilera
Odebrecht.
Ni un mes más. Ese
engendro no debe seguir allí. Hay muchas razones. Entre ellas:
La primera: Es
usar un santuario de la patria con fines políticos de codicia y de rapiña.
Todo el mundo está enterado de ello por las propias confesiones de Odebrecht.
La segunda: es un
insulto contra la fe cristiana convertir la imagen del humilde maestro
crucificado en el Gólgota en un satánico Señor de la Corrupción.
La tercera: es un
atentado contra el carácter laico y no confesional de la República y una
desnaturalización de los fines del Estado.
La cuarta: es el
asesinato moral de un gran peruano, Víctor Raúl Haya de la Torre, por parte
de un hombre que alcanzó el poder fingiendo ser su discípulo.
Como se sabe, el
23 de mayo de 1923, Haya de la Torre lideró a las organizaciones
estudiantiles y sindicales que trataban de impedir que el presidente Augusto
B. Leguía, en connivencia con autoridades corrompidas de la Iglesia Católica,
hiciera una supuesta consagración del país al Corazón de Jesús.
Esa protesta no
tenía un carácter anti-religioso, sino un propósito cívico en defensa de la
libertad de pensamiento. La acción del pueblo tuvo éxito, pero las tropas
enviadas por el tirano embistieron contra los manifestantes con lanzas y
balazos, y causaron la muerte de un estudiante y un obrero.
Esa jornada de
lucha es considerada como el nacimiento de la alianza obrero-estudiantil y de
la Alianza Popular Revolucionaria Americana. El contubernio entre el supuesto
aprista García y la empresa delictiva brasilera convierte la religión en
idolatría y borra de la historia la campaña moral del aprismo.
Para quienes
mañana estudien el Perú de estos siglos, será imposible compaginar los miles
de mártires y prisioneros apristas con el matarife que ordena el genocidio de
centenares de presos políticos rendidos.
Será difícil
reconocer como discípulo de Haya de la Torre, quien murió sin dejar bienes
materiales en su testamento, con el ávido García para quien el dinero llega
solo antes que al resto de peruanos.
José María vio
cómo el soldado chileno le hundía la lanza una y otra vez. Tal vez hoy
estaría diciendo: Saquen de aquí al Señor de la Corrupción. Ni un mes más.
http://diariouno.pe/columna/el-senor-de-la-corrupcion-ni-un-mes-mas/
_____________________
Encuentro o encontrón
Augusto Álvarez Rodrich
Tras una
accidentada vinculación en los cinco últimos meses del año 2016, esta semana
se podrá identificar –a propósito de los decretos legislativos promulgados al
amparo de las facultades otorgadas por el congreso– el estado de la cuestión
de la variable crucial del lustro: la relación entre el gobierno del
presidente Pedro Pablo Kuczynski y la mayoría parlamentaria de Keiko
Fujimori.
Para el gobierno,
será el momento de empezar a gobernar, sin excusas, con las herramientas
creadas con las facultades delegadas. Para la oposición fujimorista, será el
momento de hacer sentir, otra vez, su peso político.
El encuentro –o
encontrón, ya veremos– será este miércoles en la comisión de constitución a
donde acudirá el premier Fernando Zavala con un grupo de ministros para
explicar qué han hecho con las facultades recibidas, luego de lo cual habrá
sesiones en comisiones específicas.
Miguel Torres, el
presidente de la comisión, y sus colegas Lourdes Alcorta y Héctor Becerril
han adelantado que no son una mesa de partes y que, hacha en mano, están
listos para derogar más de un decreto.
No está mal, pues
el congreso debe ser un filtro exigente, pero sería ingenuo pensar que solo
va a revisar las normas. Puede haber un buen debate técnico, como cuando
otorgó las facultades, pero el fujimorismo también puede ir chaira en mano
como cuando censuró a Jaime Saavedra.
Esto no dependerá
de la constitucionalidad o calidad de las normas sino, para ser claro y
directo, del estado de ánimo de Keiko Fujimori, quien corta el jamón en
Fuerza Popular y decide lo que harán, sin dudas ni murmuraciones, sus 72
congresistas.
El encuentro
podría ser fluido si se presta atención al comentario de la ministra Cayetana
Aljovín en la entrevista que le hizo ayer El Comercio, donde ofrece un toque
optimista –o naranjita, más bien– cuando le preguntaron sobre la arbitraria
censura a Saavedra: “Es un tema político. Me gusta mirar los temas como
oportunidad. De repente, si no se daba ese tema, el presidente Kuczynski no
se sentaba con la señora Fujimori y comenzaban a entablar este diálogo que,
creo, es lo más positivo que se ha dado en los últimos meses”.
Pero incluso si
ese fuera el tono, es previsible que la relación entre la presidencia de PPK
y la mayoría de FP de Keiko Fujimori será compleja.
El riesgo de este
lustro seguirá siendo siempre el mismo: caminar al filo de la navaja entre
los que buscan pretextos para la vacancia presidencial de PPK y los que
promueven –como defensa– la disolución constitucional del congreso
fujimorista.
http://larepublica.pe/impresa/opinion/837674-encuentro-o-encontron
_____________________
La democracia secuestrada
Jorge Millones
Las reglas de
juego para que empresas como Odebrecht pudieran hacer “negocios” de manera
corrupta las puso la dictadura fujimorista.
En el “acuerdo de
culpabilidad” firmado entre Odebrecht y Estados Unidos (páginas 52 y 53) dice
con claridad que la empresa brasileña desembolsó 29 millones de dólares para
aceitar los engranajes de la corrupción peruana y hacer andar una maquinaria
que manejaron bien Fujimori, Toledo, García y Humala. Toda la clase política
peruana está salpicada por la corrupción, y esta lluvia de millones embarra
también a empresas nacionales del ramo de la construcción y autoridades en
varios niveles del Estado.
COIMAS DE LUJO
Esta inversión
brasileña en corrupción le permitió a Odebrecht ganar 143 millones de dólares
que salieron de las arcas del Estado peruano. Según el “acuerdo de
culpabilidad” Odebrecht creó una “División de Operaciones Estructuradas” que
no era otra cosa que una “oficina de coimeo” de alto nivel y que, según este
documento, funcionó sobre todo entre 2005 y 2009. Dice, además, que se
encargaban de negociar con representantes del gobierno (desliza también la
idea de que con funcionarios de altísimo rango) a través de empresas de
terceros.
Los fondos de la
“División del coimeo”, eran obviamente, no registrados y se va sabiendo de su
existencia gracias a que los exdirectivos de Odebrecht están cantando ante
las autoridades norteamericanas, que usarán este caso también como forma de
presión política, en países como Venezuela o Ecuador, pero de que hubo corrupción
al más alto nivel, de eso no hay dudas.
SI EL DE ARRIBA
ROBA ¿POR QUÉ NO PUEDO ROBAR YO?
En el Perú las
reglas de juego para que empresas como Odebrecht pudieran hacer “negocios” de
esta manera las puso Fujimori y las investigaciones debieran empezar desde
los noventas, pero es una idea ilusa con la mayoría fujimorista en el
Congreso y una Fiscalía y Poder Judicial funcionales a la corrupción y
generadores de impunidad.
Las manchas de
corrupción sobre la democracia peruana se las tenemos que agradecer a los
gobiernos de Toledo, García y Humala. Pues la corrupción de alto nivel es un
golpe durísimo a la institucionalidad del país, el mensaje es descalabrante
para otros funcionarios públicos que sí hacen bien y honestamente su trabajo,
es un mensaje desmoralizante para el ciudadano de a pie que siente en carne
propia los pésimos servicios en salud, educación, seguridad e
infraestructura.
Será triste y
ridículo escuchar a los liberales criticar a otros gobiernos de “no
democráticos” cuando sus propias “democracias” han sido secuestradas por la
corrupción de alto nivel. No es verdad que nuestra democracia sea mejor, lo
único que es verdad es que cada vez que hemos ido a votar siempre ganaban los
corruptos.
CRISIS DE REHENES
Lo que antes era
un rumor hoy es una realidad innegable: vivimos en una ficción democrática,
vivimos en un sistema secuestrado por la corrupción que tiene una delgada
capa democrática. Una democracia epidérmica que no logra ocultar que el poder
no lo tiene el pueblo sino los grupos de poder, los monopolios y empresas
como Odebrecht que pueden comprar gobiernos enteros por décadas.
Con este caso se
hace evidente la traición de la clase política a toda la ciudadanía, la
traición a los miles de jóvenes que marcharon por recuperar la democracia en
los noventa hasta la Marcha de los 4 Suyos, la traición a quienes sí son
honestos y hacen bien su trabajo, la traición a todos aquellos que aún tienen
escrúpulos para no delinquir y les avergüenza todo esto.
¿Habrá algún grupo
de poder económico en el Perú que no sea corrupto? No creo, es más, creo que
han tomado de rehén a la democracia y vivimos bajo el perpetuo chantaje de no
tocarle sus privilegios, porque, sino, nos meten otro 5 de abril.
Somos rehenes en
nuestra propia casa. Se han metido delincuentes a nuestra casa y se han
quedado por mucho tiempo, tanto así que los vecinos creen que son familiares
nuestros, que somos iguales a ellos, y algunos de los miembros de nuestra
familia, sino se pasaron ya a ese bando, se han ido acostumbrando
resignadamente a su presencia usurpadora. Le llaman democracia a este
secuestro, “convivencia pacífica”, no quieren siquiera que reclamemos nada,
que nos quedemos callados y no denunciemos.
TE ESPERO EN LA
CALLE
Las garitas
quemadas del peaje de Puente Piedra pueden ser el inicio de manifestaciones
similares en todo el Perú. La conflictividad se va a disparar y el debilitado
y continuista gobierno de PPK no tiene una política clara para estos casos.
Será desbordado y este escenario será aprovechado por el fujimorismo que es
el gran agente desestabilizador y pretenderá presentarse como los
“salvadores” y los “limpios”.
Ojalá que la
sociedad peruana entienda el significado histórico de este caso, que entienda
que por alguna razón los grandes medios de comunicación están guardando
silencio, que la corrupción en el Perú se ha complejizado y que la tenemos
desde el más alto nivel. Toca sacarla a patadas, porque no se va a ir por la
vía legal, pues ellos controlan la legalidad. Pero lo legal no siempre es
legítimo y toda legitimidad emana de la ciudadanía.
http://diariouno.pe/columna/la-democracia-secuestrada/
_____________________
La prensa incómoda
Alfredo Torres
La relación entre
periodistas y políticos siempre ha sido tensa. El propio presidente Pedro
Pablo Kuczynski, a pesar de su vasta experiencia, empieza a mostrar ya
síntomas de irritación ante las críticas de columnistas de opinión. “No nos
dejaremos intimidar por las amenazas de los opinólogos…”, dijo recientemente.
Es probable que el malestar del Ejecutivo por una cobertura periodística
percibida como injusta se vaya agudizando conforme pasen los meses, como ha
ocurrido en gobiernos anteriores.
Políticos y
periodistas se han mirado siempre con desconfianza, pero no pueden vivir unos
sin los otros. Los periodistas necesitan de los políticos como fuente de
información y los políticos a los periodistas para transmitir sus mensajes a
la ciudadanía. La tensión estriba en que los periodistas consideran que una
característica esencial de su función es la independencia del poder y esa
actitud colisiona con la vocación de los políticos por sumarlos a sus causas.
Para que un
político no se irrite con los periodistas y columnistas de opinión tiene que
aceptar que la mayor parte de la prensa suele estar a la caza de noticias, de
primicias, de titulares, cuanto más sensacionales mejor. Si a eso se le suma
que normalmente los periodistas carecen de experiencia en las complejidades
de la gestión pública, se entenderá que la mayoría privilegie el corto plazo
sobre el largo plazo, la frase efectista sobre la explicación exhaustiva, el
conflicto sobre el acuerdo.
Naturalmente,
existe un periodismo de mayor nivel, que investiga con rigor, analiza en
profundidad y, a veces, toma partido por una causa política, cuando le parece
justa, independientemente de si favorece al gobierno o a la oposición, pero
lo cierto es que la mayor parte de la prensa se guía directa o indirectamente
por la lectoría o la sintonía del público. O por el número de likes y retuits
en las redes sociales. En estos tiempos, es muy fácil descubrir qué tipo de
notas tienen más impacto y rara vez son las más ponderadas.
En este contexto,
el presidente puede caer fácilmente en el juego de la prensa por hacer
noticia con alguna declaración grandilocuente, que fácilmente resbala a una
frase desafortunada. Por eso se dice que el mayor enemigo de una gran
personalidad es ella misma, porque nadie como ella misma puede destruir más
efectivamente su imagen con expresiones fuera de lugar. Para proteger la
investidura presidencial, la Constitución Peruana establece que el portavoz
autorizado del gobierno es el presidente del Consejo de Ministros. Sin
embargo, la responsabilidad principal del primer ministro es la coordinación
de las políticas y acciones del Gabinete Ministerial, la gerencia general del
Estado. Ni el presidente ni el primer ministro pueden dedicarse diariamente a
conversar con la prensa porque descuidarían sus tareas principales.
Para salvar esta
dificultad, democracias más avanzadas han introducido la figura del vocero
presidencial. Se trata de un profesional de las comunicaciones cuya tarea
diaria es, de un lado, poner en la agenda de la prensa los temas de mayor
interés gubernamental, y del otro, atender consultas sobre los temas
coyunturales de mayor controversia, actuando de vocero, pero también de
escudo del presidente. Es una tarea de mucha confianza que puede ser
desempeñada por periodistas o diplomáticos de carrera. En el caso peruano,
que la cancillería tiene profesionales muy calificados tanto en actividad
como en el retiro, no le debería ser difícil al presidente identificar a un
vocero en esas canteras.
Si el presidente o
el Gobierno –bajo responsabilidad del primer ministro– cuenta con un vocero
de ese perfil, las máximas autoridades del Estado podrían dosificar sus
apariciones, lo cual incrementaría su impacto y reduciría su riesgo. El
presidente en particular tiene que ser muy consciente del carácter simbólico
de sus declaraciones y comportamiento. La opinión pública suele estar más
atenta a los gestos que a las palabras.
Por el lado de la
oposición, la prensa también despierta críticas, solo que en este caso los
calificativos son mucho más agresivos. En las redes sociales, sectores
radicales acusan a periodistas de “mermeleros”, atribuyen la opinión de los
columnistas al mandato de un cártel mediático y amenazan con una ley de
prensa. Los políticos que caigan en ese juego solo conseguirán un mayor
rechazo del gremio periodístico y la opinión pública. Un indicador del
carácter democrático de un partido es su tolerancia a las críticas. Actitudes
prepotentes o agraviantes difícilmente ganarán el respeto de la prensa y la
ciudadanía.
http://elcomercio.pe/opinion/columnistas/prensa-incomoda-alfredo-torres-noticia-1959004
_____________________
Personal de confianza
Enrique Fernández-Maldonado Mujica
Entre las peores
herencias que nos dejó el fujimorismo de los 90 están las reformas laborales.
Fue bajo su régimen que la legislación laboral dio un giro copernicano y
pasamos de tener una legislación garantista de los derechos laborales, a una
que los redujo o desapareció por completo.
Esta legislación
ha perdurado, a pesar de la transición democrática y el consenso (irresuelto)
de aprobar una ley general del trabajo. Es la constatación de la hegemonía y
continuidad del fujimorismo económico: un modelo fracasado en su objetivo de
formalizar a la masa laboral, pero que se presenta como la única alternativa.
Las reformas
fujimoristas tuvieron como eje ordenador la inestabilidad laboral. El
discurso de la flexibilidad se convirtió en trending topic para una capa del
empresariado que ambiciona potestades plenas para el despido. El Estado
también incorporó este criterio en sus relaciones laborales. Según informe de
SERVIR, uno de cada tres servidores públicos está contratado bajo regímenes
temporales (CAS y 728).
Hay quienes
consideran que la sentencia del Tribunal Constitucional (caso Telefónica,
2004) cambió los criterios de protección al trabajador. A pesar que introdujo
la reposición como una alternativa frente al despido arbitrario o nulo,
estamos lejos de vivir bajo una estabilidad absoluta, como señalan algunos
gremios empresariales. La legislación vigente dispone de una decena de
modalidades de contratación temporal. Tres de cada 4 empleos formales en el
sector privado son a plazo fijo. O sea.
La inestabilidad
laboral llega a niveles de paroxismo con algunos regímenes especiales. El
denominado “personal de confianza” es uno de los más vulnerable y expuestos.
El carácter
“especial” de este régimen reside no solo en los beneficios (horarios
flexibles, contratación directa, etc.) a los que tienen acceso. Lo es también
por su exclusión de un conjunto de derechos básicos y fundamentales. Muchas
veces las ventajas obtenidas terminan siendo anecdóticas frente a la ausencia
de una adecuada protección frente al despido arbitrario o nulo. Esta no tan
sutil contradicción –que establece categorías diferenciadas de “trabajador”–,
debería ser objeto de debate y revisión.
En el sector
público, el empleador puede prescindir de los contratos sin causa objetiva o
verificable. Poco importa si el trabajador tiene rendimientos aceptables, o
cumple un rol en la organización. Lo que priman son criterios subjetivos. En
ese trance se ve de todo.
Esta condición ha
sido denunciada como violatoria del derecho fundamental al trabajo.
Básicamente, porque la discrecionalidad del empleador sobre el empleo no es
contrapesada por un procedimiento que incorpore criterios básicos
predictibilidad y debido proceso. La vulnerabilidad del trabajador bajo esta
modalidad se intensifica al estar supeditada, única y exclusivamente, a la
voluntad del empleador. Sin causa objetiva ni instancia revisora que valga.
Una delicia de
legislación para los empleadores sin escrúpulos.
http://diariouno.pe/columna/personal-de-confianza/
_____________________
Qué hacer en la amazonía en 2017
Róger Rumrrill
Hay una agenda
pendiente muy urgente en la Amazonía de hoy; la cuestión ambiental y la
pobreza.
El año 2016 ha
sido uno de los peores en términos económicos, ambientales, sociales y
políticos para la Amazonía, la región que representa el 70 por ciento del
territorio nacional, que posee aproximadamente el 90 por ciento de las
reservas de petróleo y gas del país y que es una de las regiones megadiversas
todavía más ricas de la Tierra.
El escenario para
para el año 2017 no asoma diferente, sobre todo teniendo en cuenta el
contexto global: la nueva “guerra fría” Estados Unidos y sus aliados contra
Rusia y China y que se disputan ferozmente el petróleo y la hegemonía
mundial; el gobierno de Donald Trump que cree que el cambio climático es una
“farsa inventada por los chinos” y la persistente y ya sistémica crisis del
capitalismo tardío del siglo XXI.
El panorama
político y económico nacional tampoco es alentador. El débil gobierno de
Pedro Pablo Kuczynski (PPK) no solo está siendo puesto entre las cuerdas por
la mayoría parlamentaria de Fuerza Popular (FP), sino que ante la falta de
resistencia, reacciones y estrategias políticas y sociales, existe el riesgo
de que el gobierno de PPK termine fagocitado por la voracidad del mayor
conglomerado clientelista e informal surgido en el Perú en el siglo XX y XXI,
el fujimorismo.
Si eso le ocurre a
PPK en lo político, en lo económico no le va mejor. El déficit fiscal sigue
creciendo, las ilusiones puestas en el Acuerdo Transpacífico (TPP) se
convirtieron en frustración con la elección de Donald Trump que tiene un
discurso proteccionista. Queda por ver si el paquete de reactivación de PPK
funciona en un país que tiene una tasa de informalidad del 70 por ciento y
una corrupción ya endémica.
SITUACIÓN ACTUAL
DE LA AMAZONÍA
El año 2016,
reiteramos, ha sido un año crítico para la Amazonía. En crónicas anteriores,
hicimos un balance de las cinco regiones amazónicas: Loreto, Ucayali,
Amazonas, Madre de Dios y San Martín. De estas cinco regiones, la que está al
borde de la implosión es Loreto y la que tiene una economía estable es San
Martín. Ambas regiones pueden ser los ejemplos de qué hacer y no hacer no
solo en la Amazonía, sino en todo el Perú.
Loreto vivió la
ilusión del canon petrolero en la última década. Esta renta anual que
oscilaba entre 400 a 500 millones de soles cuando el precio del barril de
petróleo se cotizaba en 115 dólares, prácticamente se hizo humo cuando los
precios del crudo cayeron a menos de 40 dólares.
El costo social,
político, cultural de esta economía primaria-exportadora, cortoplacista y
monoproductora ha sido devastador para la Loreto: más de 70 mil puestos de
trabajo se han perdido en la región desde el año 2015, con su secuela de
mayor pobreza y el crecimiento exponencial del narcotráfico y, por tanto, de
mayor violencia y corrupción.
SAN MARTÍN:
DIVERSIFICACIÓN
Por el contrario,
en la Región San Martín, gracias a un tejido social e institucional
consistente, a una menor tasa de corrupción y a una buena conectividad, entre
otros factores de gestión y administración, se ha producido una mayor
diversificación productiva basada en el cacao, café, arroz, palma aceitera,
entre otros cultivos que, incluso, ha sustituido la mayor parte de la
producción ilegal de coca y, por tanto, ha erradicado en parte el caldo de
cultivo de la violencia.
Hay una agenda
pendiente y muy urgente en la Amazonía de hoy; es la cuestión ambiental y la
pobreza.
De acuerdo a la
Sociedad Peruana de Ecodesarrollo, la deforestación en la Amazonía en los
últimos 14 años ha devastado 11,316 kilómetros cuadrados de bosques, con un
costo de 32,000 millones de dólares. Eso no es todo: la contaminación de los
ríos, quebradas y lagos por los derrames petroleros, los relaves del
narcotráficoy el uso del mercurio en la minería aurífera está poniendo en
riesgo la biomasa pesquera, vital para la población amazónica.
En cuanto a la
pobreza, en un estudio de CENTRUM de la Universidad Católica realizado en 16
regiones y titulado “Índice de Progreso Regional del Perú 2016”, la Región
Ucayali ocupa el último lugar en progreso social, seguido por Madre de Dios,
Amazonas y Loreto.
QUÉ HACER EN LA
AMAZONÍA
La Amazonía es la
última renta estratégica del Perú en el siglo XXI. Pero para hacer realidad
esta propuesta, tenemos que resolver los problemas que ahora amenazan a
nuestro mayor banco genético.
Tenemos que
repensar el modelo de desarrollo amazónico, transitar del sistema primario
exportador y extractivo-mercantil a un modelo basado en el uso sostenible y
en la transformación de su cuantiosa diversidad.
Este nuevo modelo
debe ser, según el líder político amazónico Roberto Lay, una pesca amazónica.
Porque integra las cinco palabras de pesca: político, económico, social,
cultural y ambiental. La construcción de este nuevo imaginario amazónico por
supuesto recupera la milenaria tradición asociativa del choba-choba y la
minka y pone en valor el modelo de la chacra indígena que imita al bosque, un
sistema de diversidad productiva que pone en cuestión el monocultivo adverso
a la racionalidad de la naturaleza amazónica.
Este proceso tiene
que ir acompañado de medidas y decisiones políticas, administrativas,
económicas y sociales: romper con la recentralización del Estado en curso y
avanzar hacia la descentralización fiscal; una modificación radical y
profunda de las políticas tributarias (el regalo del reintegro tributario
recibido por las grandes empresas en los últimos cinco años toca los 419
millones de soles) y exonerativas que solo engordan a las multinacionales y a
un empresariado rentista y parasitario.
Y, por supuesto,
el reconocimiento del Estado y de todos los poderes a los pueblos indígenas
que, sin duda, están y estarán a la cabeza de la refundación de la nación
peruana y en la construcción de una nueva utopía social en el siglo XXI.
http://diariouno.pe/columna/que-hacer-en-la-amazonia-en-2017/
_____________________
¿Qué te pasa Occidente?
Guillermo Giacosa
No te avergüenza
que tus aventuras en casa ajena dejen centenares de miles de muertos y
millones de desplazados…
No te aburre tanto
papelón y tanta inmadurez. No sientes que desayunar muerte, almorzar despojos
y cenar desestabilizaciones en otras naciones te puede resultar indigesto.
No te avergüenza
que tus aventuras en casa ajena dejen centenares de miles de muertos y
millones de desplazados, que la defensa de lo que tú llamas democracia y que
son simplemente tus intereses hagan imposible la vida en otras latitudes y
que los que allí habitan deban emigrar que es una forma de morir un poco pero
que gracias a tu indiferencia en muchos casos se transforma en muerte total.
No te amedrenta
haber convertido el bello mar Mediterráneo en un cementerio. No te provoca,
ansiedad al menos, reaccionar como un adolescente cada vez que alguien te
pisa un callo y culpar de terrorista a quien buenamente defiende su tierra, su
familia, su hogar, su vida.
¿Hasta dónde
pretendes llegar? Has ido muy lejos con tus acciones y estás viviendo más
alejado aún de los valores que quizá, hasta de eso me has hecho dudar, en
algún momento de tu historia juraste proteger.
Los gobiernos que
apoyas, en distintas partes del mundo, son comparsas, integradas por los
dueños del dinero, que no solamente siempre quieren más, sino que además cada
día pierden más escrúpulos y lo que ayer llamaban tortura, ahora denominan
interrogatorio extremo, que al asesinato de mujeres y niños califican de
daños colaterales y que para que nadie pueda cultivar un poco de esperanza,
al cambio climático, que puede acabar con todos, incluida tu familia, lo
consideras un cuento chino cuando pocos ignoran que puede ser la mayor
cachetada que reciba la humanidad en toda su historia.
Nos quisiste
engañar poniendo al frente de tu país insignia, gigante adolescente de
reacciones descontroladas, a un afroamericano que resultó ser más blanco que
Bush hijo, más rubio que Clinton marido, más indiferente a la muerte ajena
que Nixon o Kissinger y menos comprometido con las injusticias sociales que
un dictador latinoamericano o que un príncipe saudí.Una farsa de pe a pa sin
que ninguna figura de establishment se pregunte si al pueblo lo toman en
joda, o ya que todo parece joda, el circo puede seguir su función sin dar
explicaciones.
Ver al
afroamericano de opereta decirse derrotado por el triunfo de los sirios en
Siria era patético. Tanto como saber que un embajador ruso era asesinado en
Turquía para evitar que las relaciones de este último país rehagan los lazos
que la unían con Rusia.
Y Rusia que no es
Occidente, al menos en gran parte de su territorio y en la conducta de sus
líderes políticos, reaccione con tan exquisita diplomacia diciendo que el
hecho prueba que hay que seguir combatiendo al terrorismo, cuando el más
inocente podría inferir dónde se cocinó la idea de dicho asesinato.
Imaginan si el
embajador asesinado hubiese sido gringo o francés al estilo Hollande, ya al
menos hubiésemos tenido un bombardeo preventivo que es algo tan inútil como
un submarino a vela y tan perverso como cualquier castigo que se ejerza
contra quien no tenga cómo defenderse.
Para colmo, el
afro decidió expulsar una treintena de diplomáticos rusos de los EE.UU,
acusados de intervenir en las elecciones de la patria de Jefferson, Monroe y
Bush y Rusia se dio el lujo de no acudir a las tradicionales represalias.
Me pregunto,
cuántos miles de diplomáticos de los EE.UU debieran ser expulsados de un gran
número de países si estos se atrevieran a hacerlo cuando alguien interviene
en sus comicios internos. Su propia medicina parece repugnar al gigante
adolescente.
¿Occidente, has
hecho números sobre la cantidad de seres humanos que han muerto por tus
bombas o tus mezquindades, desde el proceso de colonización encabezado por el
Reino Unido, Francia, España, Portugal, etc. hasta los atropellos de EE.UU en
Corea, Vietnam, Panamá y su siembra de dictaduras en toda América Latina?
¿Has reflexionado sobre las consecuencias de tu descarada lucha contra el
terrorismo y tu simultáneo financiamiento del mismo?
Cada año apareces
con un nuevo y terrible enemigo y tratas de obligar a todos tus obsecuentes
seguidores para que se sumen a tu patética paranoia. Patética y aparente,
además, porque luego nos enteramos que tú mismo inventaste el nuevo fantasma
destructor para justificar tus descarados saqueos de los recursos naturales
de otros países o las salvajes reprimendas a los que no siguen tus
orientaciones.
Occidente también
es Sócrates,Leonardo, Galileo, Giordano Bruno, San Francisco, Sartre,
Montesquieu, Camus, Voltaire, Unamuno, Rousseau, Bertrand Russell y
muchísimos más, pena que más que la luz por ellos aportada, hoy triunfen las
tinieblas y las heridas de los Hitler, los Mussolini, los Truman, los Bush,
los Cameron, los Thatcher, los Aznar, los Clinton y un casi interminable
etcétera que configuran este fascismo moderno que como todo fascismo
corresponde a la definición de Wilhelm Reich, quien dice que él mismo es “en
su forma pura, la suma de todas las reacciones caracterológicas irracionales
del hombre medio”.
Eso, triste,
primitivo y traidor de una tradición cultural llena de promesas, eso, esa
baratija moral, es el Occidente de hoy.
http://diariouno.pe/columna/que-te-pasa-occidente/
_____________________
Reformas
Eduardo Dargent
Encuentro
lamentable, aunque no sorprendente, el silencio de las élites empresariales y
la actitud de algunos periodistas frente a la censura de Jaime Saavedra. A
pesar de que los empresarios apoyaban al ministro y su reforma, como muestran
los aplausos en CADE, durante los días previos a la censura la mayoría
prefirió mirar desde el balcón la caída del ministro. Y varios periodistas
plantearon el tema como un desencuentro entre dos posiciones divergentes,
donde no había responsables, minimizando así la actitud del fujimorismo.
No me refiero a
voceros cercanos al fujimorismo o a los críticos del gobierno, de ellos era
previsible. Me refiero a quienes sabiendo lo que estaba en juego y habiendo
apoyado la reforma educativa antes, prefirieron no hacer olas. Así un sector
de líderes de opinión dejó en claro que para ellos descabezar al líder de la
reforma era un tema secundario, no justificaba crear ruido político y poner
en riesgo crecer al 4-5% el próximo año. Al fujimorismo le quedó claro que su
conducta no tiene costos frente a estos sectores.
Por supuesto, no
se trata de pedir que el empresariado ni estos voceros entren en una
confrontación a muerte con el fujimorismo. Se podía, por ejemplo, estar en
contra de plantear la cuestión de confianza y sin embargo apoyar al ministro
con firmeza. Así lo hicieron el diario El Comercio y varios otros líderes de
opinión. Esta actitud dejaba en claro que hay temas de Estado que deben
defenderse que van más allá de la economía.
No es poca cosa lo
que se ha puesto en riesgo. Es falso que en una reforma las personas sean
secundarias. En un país con instituciones débiles la credibilidad de los
líderes es crucial para avanzar y demostrar a los opositores que la cosa va
en serio. Y en este caso existía dicha credibilidad, difícil de construir en
un sector abandonado. La nueva ministra deberá mostrar que está dispuesta a
dar la pelea para retomar la iniciativa.
Si quieren conocer
más sobre el reto que implica hacer una reforma estatal en sectores difíciles
les recomiendo el libro de Jaime De Althaus La Gran Reforma (Planeta 2016)
sobre la necesidad de las reformas judicial y policial. De Althaus muestra el
lastre que significan la justicia y la seguridad para el desarrollo, así como
las enormes dificultades de reformarlas. Se deben modificar conductas
enraizadas, enfrentar a poderosos opositores internos y externos, adoptar
nuevos sistemas de gestión, luchar contra mafias enquistadas, implantar
sistemas meritocráticos, entre otros cambios que van contra el statu quo.
Todo ello con recursos limitados.
Tal vez lo más
interesante del libro para un lector que recién se adentra en estos temas es
apreciar cómo medidas razonables para enfrentar conductas corruptas se
vuelven ineficientes por la forma rápida en que la corrupción se adapta a los
cambios. El caso de los intentos fallidos de controlar el robo de combustible
en la policía, donde cada medida lleva a un acomodo corrupto, sirve de
metáfora sobre cómo los afectados suelen adaptarse y resistir las reformas.
Solo con enorme apoyo político se puede avanzar.
Le sumo a los
retos que señala Althaus uno adicional: no hay espacios en la televisión
abierta que permitan enraizar en el público las reformas. Las largas,
ilustrativas y detalladas entrevistas que ha hecho De Althaus al ministro
Basombrío sobre la reforma policial en su programa de cable, por ejemplo, son
hoy impensables en TV abierta. Los ministros van a noticieros y programas
dominicales a responder denuncias o a entrevistas express, no a explicar ni
conversar. Sin una opinión pública informada y atenta es más fácil tumbarse
las reformas.
Sí, un conflicto
abierto entre Ejecutivo y Legislativo puede evitar que crezcamos al 4-5%.
Pero les tengo una mala noticia. Si de prioridades se trata, ya deberíamos
tener claro que sin reformas de fondo seguiremos atrapados en nuestras
propias limitaciones. ¿Quieren crecer? Hagan suyas las complejas y disputadas
reformas de educación y seguridad.
http://larepublica.pe/impresa/opinion/837385-reformas
_____________________
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.