jueves, 24 de noviembre de 2016

OPINIONES 24/11/2016

Inquietudes a partir del retiro de EE.UU del TTP - Fabián Novak
Resultados de la cumbre APEC  Alfredo Ferrero
¿El mundo al revés? - Agustín Haya de la Torre
Las mafias quieren volver - Sinesio López
Fuera de la ley - Mirko Lauer
Así de grave - Patricia del Río
El viaje de Nadine - Augusto Álvarez Rodrich
Peligrosas repeticiones - Diego García Sayán
Larcomar - Franco Giuffra - Sin decir adiós - Luis Davelouis
FAO y lavado de activos - Ernesto de la Jara
Nadine apagó la luz - Javier Barreda -
No más acoso político - Gio Infante
Trump: la agonía de la democracia - F. Miró Quesada R.
Trumpetas del apocalipsis - Rafael Poch
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Inquietudes a partir del retiro de EE.UU del TTP

Fabián Novak

El Tratado de Asociación Transpacífico (TPP) es el primer megaacuerdo comercial del siglo XXI, cuyo propósito es crear un área de libre comercio de bienes, servicios, inversiones, movilidad de personas, etc., pero también servir de base para la futura creación del Área de Libre Comercio del Asia-Pacífico. Con este acuerdo, se crearía entonces el bloque comercial más grande a escala global, con 818 millones de consumidores, 40% del PBI mundial, 25% de las exportaciones y 27% de las importaciones globales.

Sin embargo, más allá de los claros beneficios que este acuerdo representa y el impulso dado al mismo por Estados Unidos de América, hace un par de días, el presidente electo de EE.UU., Donald Trump —cumpliendo con su promesa electoral—, ha anunciado que en su primer día de gobierno (20 de enero) iniciará el retiro del TPP. En realidad, técnicamente, basta con que el Congreso no lo apruebe para que dicho país no quede obligado por el referido instrumento internacional; pero sin duda, de cara a sus electores, tiene mayor impacto el señalamiento del “retiro”.

La decisión ha generado gran desconcierto y preocupación. Y no es para menos, pues abre diversas y complejas interrogantes. La primera es si habrá acuerdo entre los once miembros restantes del TPP respecto a cuál debe ser el futuro de este tratado. Por lo pronto, se aprecian reacciones y posiciones antagónicas; desde Vietnam, Canadá o Japón, que han señalado que sin EE.UU. el acuerdo no tiene sentido, pues la salida rompe el equilibrio estratégico alcanzado entre los negociadores, hasta el Perú, Chile, México y Australia, que más bien abogan por el mantenimiento del acuerdo, mientras Singapur propone reformas.

La segunda, que parte de superar el anterior escollo, es en qué términos modificar el acuerdo para que pueda entrar en vigencia para los demás integrantes, si tenemos en cuenta que el texto actual condiciona la entrada en vigor del TPP a que los países que hayan cumplido con la aprobación congresal del instrumento representen no menos del 85% del PBI del bloque, lo que es imposible sin la presencia de la superpotencia, que posee la tercera parte de este.
La tercera interrogante es si las economías que habían mostrado interés por sumarse al TPP seguirán manteniendo esta intención. Nos referimos a Corea del Sur, Filipinas, Indonesia, Tailandia y Taipéi (miembros de APEC), así como Colombia y Costa Rica.

La cuarta, de mayor profundidad, es qué implicancias tendrá la salida de EE.UU. en lo que concierne a su política exterior hacia China. Como se sabe, ambos países se encuentran en un proceso de clara competencia económica y geopolítica, y el TPP forma parte esencial de ese juego (pivote hacia el Asia), en el cual Estados Unidos excluyó abiertamente a China, y promovió la consagración de nuevas reglas para un libre comercio que limitara el desarrollo y las acciones de las empresas estatales, elevara el nivel de las normas laborales, facilitara el libre flujo de información, protegiera el medio ambiente y defendiera los derechos de propiedad intelectual, creando así dificultades para que el gigante asiático pudiera participar en este nuevo esquema comercial. Por tanto, este abandono de EE.UU. del TPP también genera interrogantes sobre el terreno en que a partir de ahora se producirá la contención a China. Incluso, de esto también surge otra interrogante, y es qué papel jugará ahora la Asociación Económica Integral Regional (RCEP), que China presentó como alternativa al TPP.

Finalmente, la quinta gran interrogante, que es la más inquietante, es si el retiro del TPP es solo el primer paso de una sucesión de decisiones proteccionistas de parte de la superpotencia y si ello conducirá a una reversión del modelo imperante en el mundo.

Difíciles los momentos que se avecinan, pues implican variables aún desconocidas e incluso oportunidades que deberán ser inteligentemente manejadas por los formuladores de nuestra política exterior.

http://elcomercio.pe/opinion/colaboradores/inquietudes-partir-retiro-eeuu-ttp-f-novak-noticia-1948723

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Resultados de la cumbre APEC

Alfredo Ferrero


Tras 18 años de su ingreso al APEC, Perú vivió intensas jornadas en su segunda vez como país anfitrión. No es poco ver en tres días a Obama, Xi Jinping, Abe, Putin, sin dejar de mencionar a Trudeau o al presidente de Vietnam, anfitrión de la cumbre 2017, además de 350 empresarios chinos y 1,200 del mundo, entre estos el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg.

¿Qué deja APEC además de publicidad, reportajes de Machu Picchu, nuestra gastronomía y el crecimiento económico sostenido?

Con o sin Trump, la agenda del APEC ha reafirmado el libre comercio, en un contexto de proteccionismo y desaceleración económica, ya que es la fórmula que mayor crecimiento les ha dado a los países. El proteccionismo siempre existió, y la paradoja es que hoy día está encarnado en un país que ha sido activo promotor de acuerdos comerciales. Ahora tienen un presidente que anuncia un cambio de giro y un no al TPP. Esto podría acentuar el liderazgo de China en el mundo de hoy. El Perú debe participar del área de libre comercio de todo el APEC y/o también en la iniciativa China (RCEP).

El APEC permitió apreciar la importancia de las pymes y la conectividad como elementos sustantivos para mejorar la productividad, acceso y comunicaciones. El desarrollo tecnológico e innovación son claves para la competitividad.

Debemos aprovechar mejor los mercados con los que tenemos acceso preferencial por los TLC. En turismo debemos adecuar nuestra oferta turística y servicios al turismo asiático/chino, que difiere del turista occidental en sus gustos y costumbres, paradójicamente un turista de importante consumo y gustos sofisticados.

Hay que destacar también el emotivo encuentro del carismático presidente Obama con los jóvenes en la PUCP, aplaudido incluso en las calles al paso de su comitiva. Algo en el Perú está cambiando.


http://peru21.pe/opinion/alfredo-ferrero-resultados-cumbre-apec-2263165


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¿El mundo al revés?

Agustín Haya de la Torre


Xi Jinping, secretario general del Partido Comunista Chino, presidente de la República Popular China, reiteró en la reciente cumbre de la APEC en Lima, su adhesión a las políticas de libre comercio en la globalización. La ocasión resultaba propicia para encarar a Donald Trump, el presidente electo de los Estados Unidos, partidario del proteccionismo.

Vemos una confrontación abierta entre las dos primeras superpotencias económicas del mundo, en la lucha por la hegemonía. Barack Obama, el mandatario saliente, consciente del reto ante el ascenso de Beijing, lanzó la propuesta de formar un acuerdo de libre comercio entre los países del Asia-Pacífico, pero sin China. La estrategia del TPP apuntaba a fortalecer un área de influencia netamente estadounidense, con la aquiescencia de Japón.

Trump piensa diferente. Más bien responsabiliza a las políticas de libre comercio de la quiebra de las industrias de su país. Su lenguaje atrabiliario caló en los trabajadores blancos subempleados, que lo votaron. Las políticas proteccionistas no son ninguna novedad para Washington. Al contrario, ocupan un lugar preeminente desde la independencia.

Alexander Hamilton, íntimo de George Washington, primer secretario del Tesoro, propuso lo que se conoce en economía como la Escuela Americana, sustentada en la economía nacional de mercado. Un diseño industrialista y proteccionista, que le permitió durante más de un siglo rivalizar con Gran Bretaña, para luego desplazarla de la hegemonía mundial. Aún después de la crisis de los años treinta, los Estados Unidos seguían recurriendo a las políticas arancelarias para defender su mercado interno.

¿Qué pretende China? En su pugna por desplazar a los norteamericanos, prosigue con el esquema que Deng Xiaoping les dejara desde fines de los años setenta del siglo pasado. Deng reinterpretó el marxismo proponiendo que el socialismo solo es posible a partir del pleno desarrollo del capitalismo. Todo ello posible siempre y cuando se mantenga la férrea dictadura del Partido Comunista.

Así que ahora tenemos en la segunda década del siglo XXI, el singular enfrentamiento entre dos políticas del capitalismo, que contienden desde la revolución industrial. Ya no son los británicos los que propugnan el libre intercambio, ahora son los chinos. Para salvar su dominio, EE.UU. vuelve al siglo XIX.

El problema es que ni unos ni otros superaron las crisis cíclicas del capitalismo. Desde la revolución industrial, el pleito por la hegemonía ha llevado a guerras y revoluciones. Los componentes favorables de la globalización, como la universalización de la democracia y los derechos humanos, parecían abrir otro porvenir.

Sin embargo, aquí los dos liderazgos encuentran coincidencias negativas. El PCCh cree que se trata de un invento occidental, por eso no practican las libertades ni los derechos sociales, mientras que Trump proclama sin pudor, el racismo, el sexismo y la desigualdad.

http://diariouno.pe/columna/el-mundo-al-reves-2/


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Las mafias quieren volver

Sinesio López


en desacuerdo, pero no se atreven a cuestionar directamente la ley universitaria que, salvo contadas excepciones, viene funcionando más o menos bien. Sólo apuntan a echarse abajo a la SUNEDU para reemplazarla por la Asamblea Nacional de Rectores (ANR), la vieja articuladora de varias mafias que manejaron el podrido sistema universitario por décadas. Alegan que la SUNEDU viola la autonomía universitaria como si la ANR hubiera sido su celosa guardiana al ponerla en manos de los intereses privados de las mafias. La ley universitaria es buena y hay que hacerle sólo algunos ajustes.

¿Quiénes quieren volver a la ANR? En primer lugar, los dueños de universidades privadas de pésima calidad que son la mayoría del sistema universitario, que no quieren ningún control que garantice su calidad académica y que sólo están interesadas en lucrar. En segundo lugar, algunas mafias agazapadas en las universidades nacionales que pretenden volver al control de las mismas. En tercer lugar, algunas autoridades eternas de universidades asociativas que ganan altísimos sueldos y que pretenden transformar las sociedades civiles sin fines de lucro en lucrativas empresas privadas, lo que constituiría un robo descarado.

Esta suma de intereses mafiosos se expresa en el proyecto del congresista Velásquez Quesquén que busca cambiar la ley universitaria y que ha recibido, al parecer, el respaldo del fujimorismo. La maniobra pasa por interpelar al Ministro de Educación Jaime Saavedra, impulsor de la actual reformauniversitaria, junto con el ex-congresista Daniel Mora, para censurarlo y obligarlo a renunciar. Esta es la madre del cordero. Las acusaciones de corrupción en el Ministerio de Educación (el mal manejo de fondos de los Juegos Panamericanos, la compra de computadoras, etc.) son triquiñuelas para justificar la interpelación del Ministro Saavedra.

Jaime Saavedra es un excelente economista (egresado de la PUCP y Phd por la Universidad de Columbia) que sabe, como pocos, lo que hay que hacer con la educación en el Perú porque ha investigado sus problemas y desafíos y ha escrito muchos artículos académicos sobre el tema. Es un funcionario honesto que quiere hacer las cosas bien y con transparencia. Si se presume la existencia de corrupción, que se investigue y que sancione a los responsables, pero que no se manche la honra de un buen Ministro como Jaime Saavedra.

Lo más irritante de todo esto es que los Catones de afiche son los congresistas partidarios y defensores de los gobiernos más corruptos de la historia (Fujimori y García). ¿Con qué cara, con qué derecho, con qué moral estos partidarios de gobiernos y líderes corruptos se erigen hoy en defensores de la moral pública? ¿Es necesario recordarles cuántos funcionarios de sus gobiernos están presos por corrupción? ¿Desconocen acaso a los corruptos que han salido del país huyendo de la justicia? ¿No saben acaso que sus líderes han sido blindados por fiscales y jueces corruptos?

Si se produce la interpelación y PPK defiende al Ministro Saavedra con energía, la polarización entre el gobierno y el fujimorismo se pondrá al rojo vivo. Una causa justa bien vale una buena batalla.




http://larepublica.pe/impresa/opinion/824527-las-mafias-quieren-volver


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Fuera de la ley

Mirko Lauer


El empecinamiento en interpelar a Jaime Saavedra aproxima la posibilidad de que él sea el primer ministro censurado del gabinete Zavala. El origen comercial y espurio de semejante decisión es conocido de antemano, pero quizás no todos los promotores de una censura son concientes de sus consecuencias políticas.

La salida de Saavedra sería el primer manazo serio dado por la mayoría fujimorista. Con eso terminarían seis meses de apuesta por una imagen racional y moderada en Fuerza Popular, y comenzaría una etapa de desembozada defensa parlamentaria de intereses particulares. Detrás del negocio universitario se formaría una cola de otros negocios.

Las ideas que justifican a la Ley Universitaria y la existencia de la Sunedu están en el aire. En una encuesta IOP/PUCP de marzo pasado casi 70% opinó que “el Estado tiene la obligación de supervisar la calidad de la educación de las universidades públicas y privadas”. Todas las cifras van más o menos en la misma dirección.

La Ley Universitaria no solo es una necesidad profiláctica en el campo de la educación superior, sino el mecanismo capaz de darle una salida positiva al descontento de masas estudiantiles cada vez más concientes de estar recibiendo gato por liebre. De allí puede salir una protesta capaz de extenderse hasta el sistema escolar.

Una censura de Saavedra no bastaría para desmantelar los esfuerzos por la educación superior. El gobierno tiene allí una causa popular y argumentos convincentes para una larga mayoría del país. Un nuevo ministro actuaría en la misma dirección, si no quiere ser aplastado de inmediato por la aplanadora parlamentaria-comercial-universitaria.

La opción fujimorista de desvirtuar la Ley Universitaria tendrá como primer efecto poner aun más de relieve la situación en las universidades donde es urgente terminar con aquellos focos donde impera un sistema de rapiña argollera y familiar, plagiaria y académicamente ridícula. FP terminaría obligado a defender lo indefendible, una y otra vez; ya bastante tiene con el blindaje de sus congresistas.

Saavedra ha demostrado flexibilidad, ofrecido cambios en la ley e iniciado discusiones con aquellos sectores legítimos que serían afectados por los cambios. Debemos pensar que la posible censura también es para que esos diálogos no sigan adelante, lo haría de FP un símbolo de los problemas y deficiencias en el sistema universitario.





http://larepublica.pe/impresa/opinion/824524-fuera-de-la-ley


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Así de grave

Patricia del Río


Un hecho insólito ocurrió esta semana. Los periodistas Rosa María Palacios y Aldo Mariátegui, que rara vez opinan de la misma manera sobre algún tema, dedicaron sus columnas a la misma causa: defender al ministro de Educación, Jaime Saavedra. Como ya se ha dicho hasta el cansancio, el ministro Saavedra, la estrella del gobierno anterior, ese que todos los candidatos a la presidencia ofrecían mantener en su puesto, se convirtió como en la piñata de este Gabinete. Representantes del fujimorismo, secundados por otros grupos opositores, han emprendido una campaña para bajárselo a como dé lugar y con ello detener la famosa reforma universitaria que ha frustrado jugosos negocios.

A Saavedra se lo ha querido involucrar en los presuntos negocios sucios del ex jefe del IPD y se lo ha culpado por la lentitud en el avance de las obras destinadas a albergar los Juegos Panamericanos. Se lo ha hostigado en el Congreso con frases y calificativos impertinentes y ha sido considerado un incompetente por políticos que son incapaces de mostrar un logro concreto. Lo curioso es que, a pesar de este apanado, según la última encuesta de Ipsos, el titular de Educación alcanza una aprobación del 40%, una de las más altas del Gabinete Zavala.

¿Por qué será? ¿Es acaso Jaime Saavedra uno de esos políticos hipnóticos capaz de convencer con cualquier floro a la población? Nada más lejano: Saavedra se ha caracterizado por un discurso técnico, por un estilo donde han primado la sinceridad y la claridad. Pero, sobre todo, y tal vez por eso sigue siendo el ministro engreído de la población, ha sido la primera autoridad frente a la cartera de Educación que logró transmitirles a los millones de padres que mandan a sus hijos al colegio que hay esperanza. Que esa educación que reciben los niños los puede hacer mejores personas. Que un país que se respeta y mira hacia adelante invierte en mejorar las aulas, pagarles mejor a sus maestros, llevar material educativo al último rincón de su país.

¿Ha sido perfecta la gestión de Saavedra? Por supuesto que no. La presunta corrupción en la compra de computadoras que investiga la fiscalía es una prueba de que gestionar un monstruo como el Minedu es una tarea compleja y a veces ingrata. Pero más allá de las críticas que puedan hacérsele, o de las excusas que la oposición encuentre para censurarlo, una cosa debemos tener claro si queremos ser un país con futuro: Jaime Saavedra es un ministro decente, que está a punto de perder el puesto por haberles malogrado el negocio a individuos inescrupulosos capaces de enriquecerse hipotecando el futuro de nuestros jóvenes. Así de grave.

http://elcomercio.pe/opinion/rincon-del-autor/asi-grave-patricia-rio-noticia-1948712



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El viaje de Nadine

Augusto Álvarez Rodrich


El viaje sorpresivo de la ex primera dama Nadine Heredia a Ginebra, en el contexto del puesto que asumirá en la FAO, no quiebra la legalidad pero, desde el punto de vista político, constituye una imprudencia.

Nadine Heredia viajó para convertirse en directora de la Oficina de Enlace de la FAO con las Naciones Unidas con sede en Ginebra.

Ayer quedó claro que Heredia no tenía, en el momento de pasar por el aeropuerto internacional Jorge Chávez, impedimento de salida del país, pues no necesitaba permiso para ausentarse del lugar de residencia ni cambiar de domicilio.

En adición, el juez que la investiga por el presunto delito de lavado de activos manifestó que Heredia cumplió con informar al juzgado de su viaje no obstante que no requería de la autorización expresa de su despacho.

Asimismo, teniendo en cuenta lo anterior, Heredia posee, como cualquier persona, el derecho a tener un empleo digno que le otorgue recursos para vivir y satisfacción profesional.

En ese sentido, la FAO –donde ella fue embajadora especial para la quinua– tiene la capacidad para decidir a quién contratar en cada posición.

Hasta ahí, entonces, si Heredia no tenía impedimento de salida del país, y si la FAO tiene la potestad de seleccionar a las personas con las que trabaja, todo estaría correcto.

Lo anterior dejaría un tanto desairada a la cancillería peruana por el comunicado que Torre Tagle emitió ayer en el cual sostuvo que expresó el “desagrado y la protesta” del gobierno peruano por la designación de Heredia debido a que esta decisión significaría una interferencia a una investigación fiscal en curso en el Perú.

Hubiera bastado la precisión que Torre Tagle hizo en el mismo comunicado de que la designación de Heredia “no responde a gestión alguna del gobierno peruano” sino exclusivamente de la FAO.

Sin embargo, la forma como Nadine Heredia salió del país resulta políticamente lamentable. No porque no tenga el derecho de hacerlo, sino porque todo político –y ella lo es pues, prácticamente, cogobernó el Perú entre 2011 y 2016– tiene la obligación de explicar, antes de ejecutarlas, sus decisiones al país.

Eso es particularmente importante en una nación como el Perú que tiene una antigua costumbre de jefes de Estado de irse del país –como Alberto Fujimori y Alan García– para que sus investigaciones prescriban, pasen al olvido, o sean procesadas en otro contexto político por un poder judicial que, como mazamorra, se adapta con facilidad al molde político que esté de moda.


http://larepublica.pe/impresa/opinion/824528-el-viajede-nadine



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Peligrosas repeticiones

Diego García Sayán

Algo así ya se ha visto en el pasado y la historia siempre acabó muy mal; por ejemplo, con la segunda guerra mundial. “Cierre de fronteras” comercial, que galopa junto con inflamados nacionalismos insuflados de racismo y el debilitamiento de espacios multilaterales como la Unión Europea (UE). El triunfo de Trump le añade combustible poderoso. Fue importante, por eso, que en la cumbre de la APEC se reiteraran los propósitos de la expansión del comercio como el camino para dinamizar la economía global.

En esta coyuntura estos principios tienen un significado especial por el amenazante camino en el mundo de un regresivo proteccionismo. No es que el mundo se encamine –necesariamente– a partir de esto hacia una tercera guerra, pero sí preocupan analogías importantes con lo que pasaba en las décadas del 30 y 40 del siglo pasado y que derivó en la segunda guerra mundial. El historiador británico Ian Kershaw ha analizado de manera prolija la historia de Europa desde 1914 destacando el efecto de nacionalismos de distinto tipo junto con la evaporación de los espacios multilaterales para llevar a la segunda guerra mundial. Entre otros factores, destaca dos que fueron decisivos.

Primero: el proteccionismo como respuesta a la gran recesión y, en general, a la crisis económica de los 30. En un remolino imparable, las barreras arancelarias y el manejo de las tasas de cambio para enfrentar las importaciones de unos, generaban medidas semejantes o más duras por los otros. Prevalecía la ilusa expectativa de que blindando fronteras arancelarias y cambiarias mejoraría la situación lo que, por cierto, no ocurrió; salvo en que contribuyó a que en el “espacio” germano floreciera la industria bélica nazi en la segunda mitad de los treinta.

Segundo: los desenfrenados nacionalismos étnicos y de confrontación que convirtieron a Europa en un espacio en el que el conflicto se atizaba no sólo entre líderes gubernamentales sino entre los pueblos. “Las guerras de los pueblos serán más terribles que las de los reyes”, dijo Churchill en 1901, en preciso presagio de lo que ocurriría treinta años después.

Hoy en Europa se repite mucho de esto. De un lado, se resquebraja la UE que, con todas sus limitaciones, ha sido el más extraordinario proceso de convergencia en la región y que fue clave para el período más largo de la historia de una Europa en paz. Si el “Brexit” le asestó a la UE un golpe severo, la amenaza de que si gana Marine Le Pen en Francia el próximo año, su “Frexit” sería la puntilla de muerte.

Por otro lado, los extremismos, cierres de fronteras y la intolerancia que guían ya a algunos gobiernos europeos (Hungría y Polonia), acechan los procesos electorales venideros (Francia y Holanda). Sustancial a esos extremismos es la estigmatización del “otro” y negarse a cumplir las obligaciones internacionales más elementales de protección a los refugiados.

Como “cereza sobre la torta”, se suma ahora el triunfo de Trump que abre curso al mayor cuestionamiento al multilateralismo, al discurso de la confrontación y a un vehemente proteccionismo. En este contexto adverso a la prosperidad económica y a la paz mundial destaca la paralela vitalidad de corrientes que van en un sentido opuesto y que –como en la cumbre de la APEC– impulsan la dinamización del comercio e inversión globales. Xi Jinping dijo en nombre de China: “No nos cerraremos, vamos a abrirnos más”. Bueno.

Importante, pero no todo se reduce a eso. Los mismos proteccionistas a ultranza son, a la vez, gran amenaza al multilateralismo que es clave para la paz mundial o enfrentar la crisis humanitaria. Sería cosa, ahora, de “revivir” las Naciones Unidas. La trayectoria y compromiso con estos temas de Antonio Guterres, quien asumirá pronto como Secretario General, debería servir de acicate para vertebrar allí voluntades y contribuir a responder las amenazas presentes.


http://larepublica.pe/impresa/opinion/824526-peligrosas-repeticiones



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Larcomar

Franco Giuffra


En Larcomar perdieron la vida, muy lamentablemente, cuatro personas. La quinta víctima ha sido el pensamiento crítico de periodistas y autoridades, que saltaron inmediatamente a una misma conclusión: la culpa la tienen los neoliberales que aplaudieron la duración indefinida de los certificados de defensa civil.

Detrás de esa ligereza está el desconocimiento de la norma que estableció esa disposición, el D.S. 058-2014-PCM. La ineficacia de ese argumento se desvirtuó después, porque ahora se sabe que UVK no tenía un certificado indefinido. No era, pues, culpa de los destrabadores sin corazón.

El D.S. 058 es una norma buena que no se debería modificar. No solo trajo la vigencia indefinida de los certificados. También puso racionalidad y orden allí donde la Subgerencia de Defensa Civil de la Municipalidad Provincial había establecido el cuartel general de la ‘Cosa Nostra’.

La norma dispuso plazos para las etapas del procedimiento, precisó responsabilidades, enumeró los documentos exigibles, entre otras cosas. Se redujo con ello el reino de la arbitrariedad y la coima, donde los inspectores de Lima pedían lo que querían, demoraban un año en emitir un certificado y, sobre la base de exigencias imprecisas, extorsionaban a los administrados.

La duración indefinida es aplicable solo si las condiciones de seguridad se mantienen invariables. El mismo decreto establece las modificaciones que deben generar una nueva certificación. Y si lo anterior resulta insuficiente, se autoriza a las municipalidades a realizar visitas en cualquier momento, sin esperar dos años.
Por lo demás, en el caso de esta tragedia, no hay ninguna indicación certera de que una visita de inspección hubiera detectado la causa del incendio o la ineficacia del protocolo de evacuación.

Ahora está sobre el tapete el tema de los roceadores y la posibilidad de exigirlos “retroactivamente”. Es un debate válido. ¿Hasta dónde es viable que ciertos locales deban adecuarse a normas de seguridad posteriores? Si es así, ¿solo debe pedirse retroactivamente los roceadores o también distancias de evacuación, ancho de pasillos y puertas antifuego?

Las normas actuales de seguridad no las cumplen la sede del Colegio de Arquitectos, el local de América Televisión o la Municipalidad de Lima, en cuyas oficinas no hay roceadores. Todos son lugares desde donde se ha salido a exigir cosas que ellos no aplican, a pesar de tener áreas y aforos para los que la normativa actual sí las establece.

Por último, detrás de todo lo anterior subyace la ilusión de que el Estado debe protegernos en todo momento y lugar. Eso solo incentiva a cumplir con la letra de la ley. “Yo hice lo que establece la norma y acá está mi cargo de recepción”.

Lo que necesitamos es que los privados y las dependencias públicas hagan mucho más. No lo hacen porque en el Perú es más barato reparar un daño que prevenirlo. Muere una persona y diez años después el Poder Judicial otorga a los deudos una reparación de cinco mil soles. La vida de un peruano no vale nada.

Si UVK y Larcomar tuvieran que pagar una indemnización de un millón de dólares por cada vida perdida, sin importar la vigencia de un certificado o la precisión del mapa de evacuación, harían más por proteger a sus trabajadores y clientes. Infinitamente más de lo que dicen los reglamentos o de lo que podría detectar un inspector.

http://elcomercio.pe/opinion/mirada-de-fondo/larcomar-incendio-ideologico-franco-giuffra-noticia-1948658



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Sin decir adiós

Luis Davelouis


Nadine Heredia se fue. Sin esconderse, por Migraciones, avisando al juez y con contrato de trabajo bajo el brazo. ¿Nadie se dio cuenta ni lo vio venir?
El comunicado de protesta por la designación de Heredia como funcionaria de la FAO (por cierto, ¿qué sabe ella de agricultura?) de la Cancillería da risa y es peligroso, porque podría ser usado para denunciar persecución política:

Heredia está siendo investigada, sí, pero no es, a la fecha, una delincuente condenada, ni un reo contumaz que se va al extranjero como perseguido político a esperar que prescriban sus delitos. Tampoco está abandonando su puesto de trabajo excusándose en una cumbre internacional como para mandar después su carta de renuncia por fax desde un país del que no puede ser extraditado. Perdón, extraditada.

Tiene derecho a buscar trabajo aquí o en el extranjero (que es más que lo que han hecho muchos y muchas) y a que se lo den. Ver a los fujis hablar de credenciales o experiencia insuficientes para el puesto da mucha risa. Ver las credenciales de su predecesora da pena y levanta todas las sospechas habidas y por haber. Dudo que vaya a regresar o que alguien siga pensando que es trigo limpio, pero me parece que legal o formalmente no hay nada que objetar. Sin embargo, es una desgracia para el gobierno y para sus ínfulas –hipócritas– de “caminar derecho” que se haya mandado mudar.

Lo que corresponde ahora es que las investigaciones sigan su curso. Si había quienes pensaban que Heredia tiene o mantiene alguna influencia sobre los poderes del Estado, pueden ahora estar más tranquilos, porque el poder es como la gravedad: cuanto más lejos está, menos influye.

Y muchas gracias por ponerme en la lista, queridos fujitrolls.


http://peru21.pe/opinion/luis-davelouis-sin-decir-adios-2263177


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FAO y lavado de activos

Ernesto de la Jara


El caso Nadine Here­dia huele peor desde el momento en que se mandó mudar a Suiza en plena investigación por lavado de activos. Peor cuando lo ha hecho usan­do como pretexto su nom­bramiento en un alto cargo de la FAO, el mismo que ha conseguido no por sus méri­tos, sino por su amistad con el presidente de ese orga­nismo.

Difícil de creer que se haya fugado, aunque nun­ca hay que decir imposible. Comprometer a la FAO en un plan así sería un muy mal negocio. Como lo se­ría también intentar vivir en otro país al margen de la ley, cuando ya se sabe que los brazos de la justi­cia se han alargado y que la treta de persecución polí­tica no funciona. Peor si se tiene a un esposo expresi­dente, parientes y amigos procesados por lo mismo, además de hijos chicos que proteger.

La otra posibilidad es que se trate de un “va y viene”, para demostrar que no tie­ne ningún interés en huir y que no hay nada objetivo contra ella, al punto que la FAO la ha hecho su repre­sentante. Pero para que no le salga el tiro por la cula­ta, tendría que haber salido del país teniendo una auto­rización judicial, pues de lo contrario se estaría arries­gando a un mandato de pri­sión preventiva. También la FAO tendría que no dejar­la caer, manteniéndola en el cargo, lo que sería un es­cándalo, tanto porque es in­aceptable que se escoja a al­guien que la Fiscalía de un país investiga por un delito perseguido internacional­mente, como porque se es­taría desautorizando al sis­tema de justicia peruano y, por tanto, afectando su in­dependencia.

Sobre la reforma poli­cial. Es sabido que es cla­ve para la seguridad y que es parte de ella sacar y po­ner gente. Lo que pasa es que cada vez que se da un paso en ese sentido, saltan los que, adentro y afuera, se benefician de la existencia de una Policía ineficiente y corrupta. Es por eso que la decisión del ministro del In­terior de pasar a 790 oficia­les PNP al retiro es una de­cisión corajuda que va en la dirección correcta. Lo que sí se tiene que hacer es ex­plicar que los criterios uti­lizados han sido objetivos y al margen de las pugnas policiales.

Mismo método senderis­ta lo que se está haciendo contra el ministro de Educa­ción. Primero el reglaje, lue­go la campaña de despresti­gio y ahora se está a punto de cometer el atentado, que puede acabar con un car­tel que diga: “Así mueren los que se no ceden al lobby de las universidades”.

He circulado una carta contando que después de 33 años me aparto del IDL (http://www.revistaideele. com/ideele/content/carta-de-ernesto-de-la-jara). La única razón es que deseo libertad personal y flexibi­lidad para asumir diferen­tes proyectos.


http://exitosanoticias.pe/opinion-ernesto-de-la-jara-fao-y-lavado-de-activos/


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Nadine apagó la luz

Javier Barreda


¿Ya Nadine Heredia mató el nacionalismo o al humalis­mo como proyecto? La situación de la señora Heredia es la situación del Partido Nacionalista o, mejor dicho, del humalismo como proyecto político. La cuestión de fondo no es saber si el proceso de selección cumplía todos los requisitos para que la FAO nombre a la esposa del expresi­dente Ollanta Humala como coordinadora o enlace en Gine­bra. La señora Heredia tiene todo el derecho a trabajar, pero también el deber de responder a las serias acusaciones que, sobre enriquecimiento ilícito y lavado de activos, se le hacen. Pero lo que no debería en ningún momento dejar de respon­der la señora Heredia es cómo sus adolescentes y erráticas acciones (durante el gobierno de su esposo y ahora con su nombramiento en la FAO) han terminado de sepultar lo poco que podía quedar de los que construyeron un proyecto que desde el 2006 al 2011 generó a la vez ilusiones e inestabili­dad con un discurso radical e incendiario y, ya en el gobier­no 2011-2016, cayó bajo una tecnocracia errática y de una frivolidad extendida en el poder que en términos reales pa­ralizó al país.

Su decisión de irse a Ginebra es una ac­ción desesperada por estar a buen recado en un clima post 2016, evi­dentemente hostil ha­cia ella, por los resul­tados y cosechas de lo que ella mismo sembró, limitando y disminuyendo a su an­tojo y cálculo la propia figura del presidente de la República, nombrando funcionarios y ministros, jugando con los candi­datos presidenciales del humalismo y, por último, suprimien­do toda la posibilidad para que el partido que ella presidía ten­ga alguna presencia parlamentaria en el Congreso y pueda aspirar a subsistir.

El tema judicial y sus responsabilidades es otro cantar. Su decisión de guarecerse en la FAO es otra demostración de su desdén por la propia herencia de su gobierno, de la inexisten­cia de una prestancia que debería tener la presidenta de un partido que llegó al poder, y evidencia su poca personalidad política al optar por una decisión cuestionada incluso por su último y leal ex primer ministro. Es muy posible que los me­canismos legales y diplomáticos mantengan a la señora He­redia en Ginebra. Pero ella escribe así el final de un efímero liderazgo que en algún momento prometió algo distinto en un país que demanda paralelamente renovaciones y solucio­nes concretas. La señora Heredia de Humala decidió apagar la luz de un proyecto que en algún momento tantas ilusiones generó, pero también inacabables decepciones.


http://exitosanoticias.pe/opinion-javier-barreda-nadine-apago-la-luz/


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No más acoso político

Gio Infante


Un machista, eso es lo que es Ro­berto Vieira, el fujimorista con­vertido en congresista gracias al pepekausismo. Llamar “cor­tesana todopoderosa” a Mercedes Aráoz es un acto de misoginia pura y dura. Y no porque ser cortesana, prostituta, traba­jadora sexual sea indigno ni nada por el estilo. El trabajo sexual es una labor dig­na, dignísima, como cualquier otro oficio, y debe ser reconocido y protegido como tal por las leyes y el Estado. Pero el asun­to acá no es ese. Ni Vieira ni nadie cues­tionaría a ningún político hombre hete­rosexual apelando a su sexualidad: esos ataques se reservan para aquellos a los que el sistema ve como sujetos subalter­nos, como las mujeres y las personas ho­mosexuales. Si no, recordemos a nuestro presidente de lujo hablando de la “perra vida” de Verónika Mendoza en la última campaña electoral o al mejor alcalde de la capital refiriendo en la de 2011 que Carlos Bruce “es una loca”.

El acoso político contra las mujeres es toda forma de violencia que busque can­celar su participación política, sea en or­ganizaciones sociales, gremiales, partida­rias e incluso en instancias oficiales como el Congreso. Y es que esta práctica es mu­cho más frecuente de lo que pensamos. Una de cada cinco mujeres ha sido víctima de alguna agresión a partir de su partici­pación política, según investigaciones del Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán y el Jurado Nacional de Elecciones. La si­tuación se agrava en aquellas que son au­toridades: dos de cada cinco. El 67% de las mujeres políticas fue atacado por sus adversarios políticos, el 39% por sus pro­pios correligionarios y el 30% por medios de comunicación. La intensidad de las in­jurias contra la exalcaldesa Susana Villa­rán y los silencios cómplices de la prensa frente a la infame gestión de Luis Casta­ñeda son un buen ejemplo, ¿no?

Ayer el Frente Amplio presentó un pro­yecto de ley para sancionar estas situa­ciones. Mientras tanto, prácticas como las de Vieira corren el riesgo de quedar impunes en una Comisión de Ética con­trolada por el fujimorismo, aparato políti­co que lo último que tiene es aprecio por los derechos de las mujeres. Si no, vea­mos la reciente denuncia de Rosa María Palacios sobre el hostigamiento del fuji­morismo contra sus congresistas mujeres. No en vano esta es justamente la forma de acoso político más frecuente porque no deja huellas. O eso se cree.


http://exitosanoticias.pe/opinion-gio-infante-no-mas-acoso-politico/



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Trump: la agonía de la democracia

F. Miró Quesada R.


El Tea Party, los White Anglo-Saxon Protestant (WASP), Marine Le Pen, el Ku Klux Klan, entre otros predicadores de la ideología del odio, la discriminación y la exclusión están de plácemes con la elección del magnate multimillonario Donald Trump. Se trata de un ‘tycoon’ pedante e insensible con el prójimo que predica un discurso muy común entre algunos estadounidenses, en donde el ganador, el que triunfa, es el que tiene plata y los otros son perdedores, pobres y miserables.
A lo largo de la historia política de Estados Unidos, sobre todo si tomamos como referencia las elecciones presidenciales durante el siglo XX y lo que va de este siglo, nunca llegó a la primera magistratura un empresario. Hubo intentos como el de Rockefeller, pero no tuvieron éxito.

No tiene nada de malo que un empresario sea presidente en cualquier país pero hay “empresarios” y empresarios. Precisamente, Donald Trump pertenece a la clase de empresarios entrecomillados. Es xenófobo (tiene fobia a los de afuera, a lo foráneo, a lo extranjero), racista, de actitud y discurso político autoritarios, ultraderechista, vale decir reaccionario, populistón y misógino (desprecia a las mujeres), machista, soberbio, insolidario y homofóbico.

Arremete contra los latinos (o sea, nosotros que estamos detrás del Río Grande), representados por los mexicanos. Pero no solo eso, también contra los musulmanes, identificados con los árabes, los que para él son terroristas, sin distinguir esta práctica criminal con los millones de creyentes de esta religión. Una generalización que demuestra su desprecio por otros pueblos y otras culturas, cuando musulmanes no son solo la mayoría de los árabes, porque los hay cristianos y judíos, sino turcos, iraníes, indonesios, pakistaníes y en gran parte de la India.

¿Qué pasaría si en uno de sus arrebatos, Trump decidiera construir un muro a lo largo de una frontera de aproximadamente 3.000 kilómetros? Sería una desgracia y el oprobio para toda América y el mundo. Un muro que nos separa, que nos dice aquí nadie entra pero nosotros sí podemos ir a tu país y a cualquier lugar del mundo. ¿Cómo van a reaccionar las Naciones Unidas, los demás gobiernos y los presidentes de América Latina ante tan inhumana idea y propuesta, ante semejante posibilidad?

Trump es un ‘underdog’, una especie de ‘outsider’ que navega en el sistema democrático pero despotricando contra sus valores fundamentales de libertad, igualdad y dignidad. También es un ‘party switching’, un migrante político que cambia de afiliación según convenga a sus intereses. Fue demócrata, después republicano, ingresó a un partido poco conocido (el de la Reforma), regresó al demócrata y luego al republicano. Su discurso es de odio a los que no son suyos, a los que no piensan como él y muchos lo apoyan porque tienen la misma manera de ver la vida y el mundo.

¿Por qué muchas personas aprueban discursos como los de Trump, no solo en Estados Unidos, sino en otras latitudes? Creo que hay dos causas. La primera es nuestra poca capacidad de autocrítica, por eso le echamos la culpa al otro de nuestros problemas, tragedias y desgracias. La segunda es la tendencia a la sumisión ante líderes autoritarios que nos prometen grandes y demagógicas soluciones y logran trocar la libertad por la seguridad, como sucedió, por ejemplo, con Hitler.

Trump es la encarnación de esa mentalidad incapaz de reconocer al otro, al distinto, al diferente. Una mentalidad antidemocrática, porque en el fondo la democracia, entre otras cosas, implica el reconocimiento del otro, como bien afirma Alain Touraine. Y si esto no se acepta, si se rechaza como cuestión previa, la democracia pierde su esencia. Empieza a agonizar, y con ella la política basada en sus principios.

Con políticos como Trump –que son varios–, con gente que piensa como ellos –que son muchos–, vamos a asistir a la agonía de la democracia. Por eso las fuerzas democráticas de Estados Unidos y del mundo deben responder a esta nueva corriente que amenaza seriamente los valores democráticos, como lo han hecho los jóvenes estadounidenses, que indignados han salido a protestar.

¿Quién podrá más? ¿La voluntad de un presidente o el sistema de ‘checks and balances’ y los valores que dieron nacimiento a la nación más poderosa del mundo?

http://elcomercio.pe/opinion/colaboradores/trump-agonia-democracia-f-miro-quesada-r-noticia-1948650


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Trumpetas del apocalipsis

Rafael Poch


Dice el sociólogo argentino Atilio A. Boron que, “América Latina no puede esperar nada bueno de ningún gobierno de Estados Unidos, como lo ha demostrado la historia a lo largo de más de dos siglos”. Desde luego, esa no es una declaración de amor a Estados Unidos, pero si una manera realista de zanjar el debate y los lloros sobre las consecuencias de la victoria de Trump y de lo mucho mejor que habría sido la victoria de su encantadora rival.
El resto del mundo podría suscribir la afirmación de Boron, por lo menos desde la Segunda Guerra Mundial, porque ninguna potencia ha hecho más daño al mundo desde entonces que la primera potencia. Constatado eso y abandonada toda vana ilusión, el debate puede enfocarse alrededor de otra pregunta.

¿Tiene ventajas el desbarajuste?

Dice Michael Moore, uno de los que mejor vio venir la victoria de ese ovni reaccionario que es Donald Trump, que el nuevo presidente no acabará su mandato. Estados Unidos se ha convertido en una fuente de imprevisibilidad. De puertas adentro hay cierto estupor en el establishment de Washington y la mitad de los ciudadanos no consideran a Trump su presidente. Solo con eso ya basta y sobra para unos cuantos incidentes. Así que la pregunta es si el previsible follón interno que este nuevo presidente pueda ocasionar, no mermará la capacidad de dañar al mundo de la potencia. En otras palabras, ¿nos dará Estados Unidos cierto respiro, ciertas vacaciones, mientras aclara qué hacer con eso, o mientras eso aclara lo que va a hacer y cómo?

De puertas afuera, la potencia americana se ha convertido en fuente de incertidumbre. Eso es nuevo. Los expertos intentan deducir programas y líneas de acción, de la serie de eructos incoherentes lanzados por Trump durante la campaña, pero un razonable pesimismo nos dice que lo que resulte de ello más bien parece que incrementará la peligrosidad de eso que llamamos Imperio del Caos, entendido como lo que resulta de la negativa a aceptar el propio declive hegemónico, y las malas y dañinas decisiones de fuerza encaminadas contra el multilateralismo y la práctica diplomática que se desprenden.

Rusia y China

Con Rusia solo quienes creyeron la fallida propaganda de Clinton & Cia de que Trump era el candidato de Putin, pueden esperar que haya una mejora de relaciones. Lo más probable es que el par de frases benévolas lanzadas por Trump sobre el Presidente ruso durante la campaña queden en nada.

Sea como sea, en China seguramente sí se han preocupado por esas frases, pues saben que las mejores y más estrechas relaciones de Moscú con Pekín fueron resultado directo de la negativa occidental a tener en cuenta los intereses rusos metiéndole el dedo en el ojo al oso una y otra vez hasta llegar a Ucrania. Los chinos conocen la esquizofrenia del águila bicéfala rusa, con una cabeza mirando al Oeste y la otra al Este, y pueden pensar que si esos intereses son tenidos un poco más en cuenta el pajarraco estaría encantado de corresponder a expensas de China. La novedad con respecto a la situación de hace veinte años es que desde entonces el occidentalismo ruso, la predisposición a comprar sin mirar todo lo que viene del Oeste, ha sufrido mucho en Moscú, y es difícil que los rusos de hoy, mucho más fríos y realistas que los de entonces, se avengan a comprar collares de cuenta y espejitos. Deberían ofrecerles algo bien serio, sólido y por escrito, lo que no parece probable.

Todo esto habrá que verlo en la práctica, en caliente, y seguramente será en el Mar de China donde la acción exterior de Trump será tanteada y puesta a prueba.

UE: La gran juerga

Pero si en Rusia y en China, la situación es ambivalente, en la Unión Europea los efectos del trumpeteo son tragicómicos. El mero anuncio de que el actual presidente electo relativiza a la OTAN, es decir que cuestiona el papel preponderante de Estados Unidos en el viejo continente, ha sembrado el pánico y el desconcierto en Bruselas. La situación recuerda a lo que ocurría en los países del Este en 1988 y 1989 cuando Moscú dimitió del papel de gendarme dirigente y les dijo a los vasallos: “ahora, haced lo que queráis”.

Claro que no se ha llegado a eso, ni se llegará, pero el pánico y la confusión ocasionados son comparables.

Tal como están las cosas en la UE, es decir con sus promesas de prosperidad y democracia completamente desprestigiadas por las crudas realidades oligárquicas evidenciadas por la crisis del neoliberalismo, lo único que cohesionaba a ese grupo de papanatas de Bruselas era el fantasma del “peligro militar ruso”. ¿Y de repente el trumpetazo sugiere desde Washington que no está interesado en ello? La reacción solo podía ser militar. Una huida hacia delante es todo lo que son capaces de ofrecer.

Bajo presión alemana, la última reunión de los ministros de defensa de la UE ha enfatizado la puesta en marcha de estructuras militares independientes de la OTAN. Su comunicado habla incluso de “autonomía estratégica”. Más fácil decirlo que hacerlo.

Los británicos y algunos europeos del Este no quieren saber nada del asunto. Se fían más de una estrecha cooperación militar con Estados Unidos que de cualquier “ejército europeo” bajo liderazgo alemán, algo que los militares franceses, obviamente, tampoco suscriben.

“Tras la elección de Trump la defensa de la democracia liberal pasa a ser nuestra misión superior”, “Europa debe asumir mas responsabilidad en política exterior y de seguridad”, señala un papel del think tank alemán DGAP, correa de transmisión de las ambiciones exteriores alemanas. Como en Berlín se dice “Europa” pero se piensa “Alemania”, ver a ese país erigirse en defensor de la “superior misión de la democracia liberal”, es algo que produce bastantes escalofríos. Así que lo más probable es que la reacción securitaria al ambiguo trumpetazo agudice aún más el inevitable proceso de desintegración europeo al que asistimos desde hace algunos años.


http://blogs.lavanguardia.com/paris-poch/2016/11/17/trumpetas-del-apocalipsis-59028/

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